Personal del SAMU-061 atendió al paciente en la Jefatura de la Policía Nacional. | G.P.

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Vivo de milagro. Un hombre de unos 30 años -con múltiples antecedentes policiales por estancia ilegal en el país- intentó ahorcase este jueves en los calabozos de la Policía Nacional de Palma.

A las 14 horas, los funcionarios encargados de la guarda y custodia de los detenidos se percataron de que uno de ellos estaba intentando ahorcarse en su celda. Rápidamente, los policías activaron el protocolo establecido en estos casos, solicitaron refuerzos a sus compañeros y accedieron al interior del recinto logrando, milagrosamente, salvarle la vida.

Los agentes, descolgaron al detenido que había aprovechado su propia ropa para realizar una improvisada cuerda, la había atado a los barrotes de la puerta de la celda y se había dejado caer con la clara intención de quitarse la vida. Cuando la Policía Nacional detiene a una persona, por cuestiones de seguridad, antes de entrar a la zona de reseñas y calabozos, a todos los arrestados se les quita el cinturón, cordones de los zapatos y cualquier tipo de pertenencias personales. Con suma celeridad, se alertó a una ambulancia medicalizada del Servei d’Atenció Mèdica Urgent (SAMU-061) quien acudió de urgencia hasta la Jefatura de Policía, en la calle Simó Ballester. Una vez allí, el facultativo logró estabilizar al paciente y debido a la gravedad del estado que presentaba el paciente ordenó su traslado urgente hasta la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de Son Llàtzer. A la salida de Jefatura, el súbdito argelino de 30 años, estaba vivo, pero su estado era grave.