En la foto, el momento en el que agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil ayudan a los empleados de la funeraria a introducir en el coche fúnebre el cadáver del turista alemán. La autopsia está prevista para mañana por la mañana. | Alejandro Sepúlveda

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¿Qué le ocurrió a Bernhard Kirscht? La Policía Judicial de la Guardia Civil está reconstruyendo las últimas horas del turista alemán que apareció muerto en su habitación de s’Arenal con numerosos golpes y de momento se barajan dos hipótesis principales: que sufriera horas antes una aparatosa caída o que fuera víctima de una paliza.

La autopsia al veraneante de 56 años ha quedado aplazada hasta el lunes y este sábado se encargaron varias pruebas al cadáver, entre ellas un TAC para detectar si presenta fracturas internas de huesos. En el examen forense los médicos también comprobarán si bajo las uñas tiene tejido humano, que podría indicar que se defendió de sus agresores.

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Bernhard Kirscht parece ser que llegó el miércoles día 20 a s’Arenal y los hechos ocurrieron, casi con seguridad, esa misma noche. En la zona del hotel Bahamas, donde se alojaba, está repleto de viajes de estudios y el alboroto esa noche fue considerable. Quizás por ese motivo nadie reparó en una aparatosa caída o en una pelea, opinan los investigadores. Sea como fuere, la llave electrónica de la habitación del turista germano ha marcado que esa madrugada regresó al hotel y salió luego por la mañana. La última vez que regresó fue a las 14.00 horas del jueves. Y a partir de ese momento no se sabe qué ocurrió, sobre todo porque no salió del cuarto.

El viernes por la tarde, la mujer de la limpieza encontró su cadáver en el suelo, boca abajo y junto a la cama. Había manchas de sangre y al lado de él había una toalla, con la que presumiblemente intentó taponar una de sus heridas. El cuerpo presentaba más de una docena de golpes, algunos de ellos en la cabeza.

El caso pasó a manos de la Guardia Civil y un forense examinó el cuerpo sin vida, que llevaba horas inerte. Ayer, los investigadores continuaban realizando gestiones para intentar aclarar lo ocurrido y confirmaron que el fallecido no había alquilado la caja fuerte de su habitación. Llegó solo y los agentes han contactado con otros turistas para saber cuál fue su rutina en el poco tiempo que estuvo en el establecimiento hotelero y si comentó con algún compatriota lo que le había ocurrido. La autopsia del lunes será clave para saber si Bernhard cayó o fue apaleado.