Flores, en el lugar donde se produjo el atropello. | Alejandro Sepúlveda

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La familia de la niña de 14 años que falleció atropellada cuando realizaba una prueba escolar en Palma ha pedido a la magistrada instructora la imputación de un segundo profesor por homicidio imprudente.

El siniestro se produjo el pasado 26 de abril sobre las nueve y media de la mañana. La niña, alumna de tercero de ESO, estaba en ese momento con dos profesores de educación física. Uno de ellos ya declaró como investigado por la muerte de la menor y el otro lo hizo como testigo. La acusación particular, ejercida por el letrado Daniel Castro en representación de la familia de la fallecida, ha solicitado ahora que también sea imputado un profesor que estaba en la zona boscosa en la que los niños tenían que hacer la prueba y que, según, algunos testigos, estaba cerca del lugar del atropello.

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La decisión de la acusación llega después de que la magistrada instructora haya rechazado que declaren como testigos varios compañeros de clase de la niña. Éstos habían apuntado ante la Policía Local que el primer profesor dio la salida a la fallecida sin controlar si pasaba algún vehículo por la zona. Según el atestado policial hay otros elementos para justificar que los profesores cometieron una imprudencia, como el lugar elegido para iniciar la prueba, que obligaba a cruzar la calle o que hubiera un camión aparcado que dificultaba la visibilidad.

En sus declaraciones, los profesores del Madre Alberta defendieron que era habitual iniciar las pruebas en ese punto y negaron que el camión dificultara la visión en ese momento. En la causa también declaró como imputado el taxista por circular por encima del límite de velocidad.