El acusado de asesinato, Sergio Morate, en la sala de juicios donde tuvo lugar la vista oral del juicio. | Efe

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La Audiencia Provincial de Cuenca ha condenado a Sergio Morate, a quien un jurado popular declaró culpable de los asesinatos de su exnovia Marina Okarinska y de la amiga de ésta, Laura del Hoyo, a 48 años de cárcel.

El presidente de la Audiencia Provincial de Cuenca, José Eduardo Martínez Mediavilla, ha dado a conocer la sentencia contra Morate, que ha seguido la lectura del fallo del juez por videoconferencia desde la cárcel de Estremera (Madrid) en la que está interno desde septiembre de 2015.

La sentencia, con fecha de este martes 7 de noviembre, ha sido leída en audiencia pública, ante una multitud de periodistas de todo el país en la Audiencia provincial de Cuenca, donde hace nueve días Morate fue considerado culpable por unanimidad de un doble delito de asesinato por un jurado popular.

El tribunal ha condenado a Morate a 25 años de cárcel, la máxima legal, por la muerte de Marina, al concurrir el agravante de parentesco y género.

En el caso de Laura del Hoyo, Morate ha sido condenado a 23 años de cárcel, y en este caso se aplica el agravante del «abuso de autoridad», pero no de «abuso de confianza» al no considerarlo probado el jurado popular.

La sentencia recoge las peticiones de condena que formuló la Fiscalía en su escrito.

El magistrado ha destacado la «brutalidad y perversidad del acusado», que ha provocado un «gran sufrimiento a las familias».

Las indemnizaciones superan los 650.000 euros, de los cuales 120.000 euros son para cada uno de los padres, 40.000 euros para las hermanas y 50.000 euros para el marido de Marina.

Asimismo, le prohíbe residir en Cuenca, acercarse a menos de 500 metros de los familiares de las víctimas o comunicarse con ellos durante un plazo de diez años tras el cumplimiento de la pena, en el caso de Marina, y ocho en el de Laura, así como el mismo período de libertad vigilada.

El jurado popular consideró probado que Morate mantuvo una relación de pareja con Marina Okarinska y que, tras poner fin ésta a la relación, el acusado gestó la idea de acabar con su vida y urdió un plan para llevarlo a cabo y deshacerse de su cadáver.

Asimismo, se ha considerado probado que Marina, junto a su amiga Laura del Hoyo, acudieron al domicilio de Morate de la calle Río Gritos a recoger unos enseres y allí acabó con la vida de su exnovia por asfixia mecánica por estrangulación.

También que, para no dejar testigos, acabó con la vida de su amiga entre las 17.30 y las 18.00 horas del 6 de agosto de 2015, y las enterró en cal en un paraje de Palomera (Cuenca) y huyó a Rumanía.

Tras conocer la sentencia, la madre de Laura, María Chamón, ha manifestado que «se ha hecho justicia», y que la pena de cárcel «nunca será suficiente: ni 23, ni 40, ni 50 años», porque es un «asesino, criminal, frío y calculador» que «ha destrozado la vida» a las familias de las víctimas.

Por su parte, la hermana de Marina, Alina Okarinska, ha reconocido que están por una parte contentos, y ha mostrado su deseo de que Morate «se pudra en la cárcel y que cumpla lo máximo posible», aunque ha lamentado que «nunca nadie» podrá «devolver a Marina y Laura» a sus familias.

«Página no se puede pasar nunca. El juicio se ha cumplido pero nosotros seguimos igual, sin mi hermana», ha lamentado Alina Okarinska.

El abogado defensor, José Javier Gómez Cavero, ha indicado que visitará al condenado en la cárcel para comunicarle en persona la sentencia y decidir si presentan un recurso a la misma, y ha resaltado que la condena impuesta es «exactamente la misma que pedía el ministerio fiscal».