El acusado, de 26 años, en el banquillo de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial. | Alejandro Sepúlveda

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«Todo este tema me ha ocasionado problemas de ansiedad. He bajado casi 10 kilos de peso, he perdido una pareja y mi familia está destrozada tanto en Argentina como aquí. Soy incapaz de hacer una cosa así. Yo estaba con mis amigos en otra parte. No entiendo cómo me pueden acusar a mí». Un joven de 26 años negó este jueves en el juicio celebrado en la Audiencia que intentara violar a una chica. Él nunca estuvo en la calle Den Bosc de Palma la madrugada del 18 de febrero de 2012.

El acusado explicó que esa noche fue a una fiesta universitaria de disfraces en la antigua sala Assaig (polígono de Son Castelló). El joven contó ante el tribunal que llegó a la fiesta sobre las dos de la madrugada y se fue antes de las seis para acompañar a sus padres al aeropuerto. La Fiscalía reclama siete años y medio de cárcel por un intento de agresión sexual y un robo con violencia.

La fiscal, en su relato, cuenta que el joven se encontraba en la calle Den Bosc a las tres y cuarto de la madrugada. Abordó por detrás a la chica y la intentó violar, pero no lo consiguió por la resistencia que mostró la perjudicada. El procesado le arrebató un anillo valorado en 1.700 euros, una cartera, unas gafas de sol, un neceser y 40 euros.

La policía nacional presente cuando la víctima reconoció al agresor en unas fotografías dijo que la chica se puso «muy nerviosa» cuando le enseñaron la imagen del acusado. «Lo vio evidente, fue muy rotunda y no dudó».