TW
0

Un barco de Vigilancia Aduanera ha interceptado a 93 millas al sureste de Cartagena (Murcia) el velero Diosa Astarte, con cuatro tripulantes y cerca de 320 fardos de resina de hachís, cuyo peso alcanza casi las 8 toneladas, informaron fuentes de la Agencia Tributaria.

La cantidad incautada es claramente inusual para una embarcación de este tipo, un barco de vela del tipo balandra, y se calcula en 12,5 millones de euros el valor que hubiera alcanzado en el mercado negro la droga, que ha llegado hoy al puerto de Cartagena, junto a los detenidos, dos españoles, un boliviano y un marroquí.

La operación Mar arranca cuando medios aéreos de Vigilancia Aduanera detectaron al yate navegando sin un rumbo definido, en una zona habitualmente utilizada para la carga de este tipo de estupefaciente, por lo que se organizó un seguimiento que culminó este domingo, a las 13.30 horas, con el abordaje por parte de la tripulación del patrullero de Vigilancia Aduanera Colimbo IV, con base en Cartagena.

Cuando los funcionarios accedieron a la cubierta del velero, de 15 metros de eslora y pabellón español, se encontraron los fardos y petacas de gasóleo, por lo que detuvieron a los tripulantes, que han pasado a disposición del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional.

Esta nueva operación ratifica la importancia de la ruta del Mediterráneo Oriental para los narcotraficantes del norte de África, que transportarían importantes cantidades de hachís en barcos de tipo mercante o pesquero.

Utilizando estas embarcaciones, la droga se redistribuiría posteriormente hacia Europa, sin descartar que, en algunos casos, pudieran ser utilizadas como buques nodriza para transbordar el hachís a otras embarcaciones menores, que las introducirían directamente en las costas españolas o italianas.

La Agencia Tributaria ha recordado que en los últimos tres años, las autoridades italianas, francesas y españolas han interceptado 25 embarcaciones, 15 de las cuales han sido en operaciones de Vigilancia Aduanera, y que portaban cantidades de hachís que han llegado a alcanzar las 30 toneladas de peso.