Once prostitutas fueron detenidas en la última operación policial. | Vasil Vasilev

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Duro golpe a la prostitución nigeriana de la Platja de Palma. El Cuerpo Nacional de Policía ha conseguido que la autoridad judicial dictase siete órdenes de alejamiento contra prostitutas de s’Arenal de Palma y Llucmajor. Los clanes nigerianos que roban a turistas ebrios en la Platja de Palma están perfectamente estructurados y se reparten las distintas zonas de actuación.

A principios del mes de septiembre, el juzgado de guardia envió a prisión provisional a cinco personas de nacionalidad nigeriana arrestadas por formar parte de una banda dedicada a robar a turistas. Unos días antes la Unidad Central contra las Redes de Inmigración y Falsedades documentales (UCRIF) practicó una operación contra esa banda en s’Arenal donde se identificaron a más de 40 prostitutas y se procedió al arresto de once de ellas, ocho de ellas por robos con violencia y hurtos, y tres más por infracciones a la Ley de Extranjería.

Tras actuar contra el grupo en su zona de operaciones, días más tarde, los agentes especializados realizaron varios registros en Son Gotleu, donde residían las cabecillas del grupo. De las siete detenidas en esta nueva operación, el juez ordenó el ingreso en prisión de cinco de ellas. El grupo se dedicaba tanto a la prostitución como a los robos con violencia, cuyos objetivos suelen ser turistas ebrios que caminan solos y que son abordados por mujeres que les ofrecen un servicio sexual.