Al acusado se le imputa un delito de tráfico de anabolizantes. | Alejandro Sepulveda Soler

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Agentes del Grupo de Atracos del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de un conocido luchador de kickboxing de Palma acusado de encerrar a un amigo suyo durante media hora en el maletero de su coche.

Se trata de un varón de 29 años al que se le imputan los delitos de detención ilegal, delito contra la salud pública y falsedad documental, al sustraer recetas médicas del despacho de un facultativo de la policlínica Miramar de Palma. Una vez analizados los hechos, el juez de guardia ordenó su ingreso en prisión.

Los hechos se remontan al pasado día 26 de julio. La víctima mantenía amistad con otro hombre, el cual hace aproximadamente un año entró en los despachos del centro hospitalario y sustrajo recetas médicas. Tras el hecho, el ladrón pidió a la víctima que le ayudara a sacar anabolizantes de las farmacias con las recetas sustraídas, a lo que éste se negó.

Pocos días después, ambas personas se reunieron para tomar algo en un bar, y en un momento dado la víctima fue introducida contra su voluntad en el maletero de un vehículo. Estuvo dentro del mismo más de media hora, hasta que le dejaron salir, en un área cercana al Molinar.

Días después, el autor comenzó a proferir diferentes amenazas contra la víctima, por lo que este procedió a denunciar ante la Policía Nacional todos los hechos acontecidos. El denunciante pudo aportar a los investigadores mensajes de móvil en los que podía comprobarse que el luchador de kickboxing vertía amenazas de muerte.

La policía tras recibir la denuncia comenzaron a realizar diferentes investigaciones en las que se intervino un total de 21 recetas, habiendo recetado entre otros medicamentos Winstrol, Testex y Provirón. Posteriormente, el pasado lunes, el Grupo de Atracos procedió a la detención por los diversos delitos cometidos.

El acusado cuenta con numerosos antecedentes policiales. Desde el año 2005 hasta la fecha había sido detenido en cuatro ocasiones. Dos de ellas por lesiones, una por una reclamación judicial y otras por un hurto. Ahora hay que añadirle una retención ilegal, una delito contra la salud pública y otro de falsedad documental.