El material recuperado por los agentes, cuyo valor asciende a 15.000 euros. | Guardia Civil

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El rastreo de las llamadas de un teléfono móvil sustraído ha llevado a la detención del supuesto autor de varios robos en viviendas vacacionales del Port de Pollença y Manacor, otros dos robos en Inca y un hurto en Sóller. También ha sido arrestado un individuo por receptación del móvil sustraído, en el transcurso de una investigación que ha llevado a cabo la Guardia Civil de Pollença.

Los agentes han recuperado 15 teléfonos móviles de última generación, cinco tabletas, dos ordenadores portátiles, seis cámaras de fotos, un navegador GPS y un reloj omega de lujo, valorado todo en unos 15.000 euros. La mayoría de estos efectos han sido devueltos a sus propietarios, a raíz de las denuncias que presentaron.

La investigación se inició después de una serie de robos cometidos en viviendas vacacionales de Pollença el pasado mes de abril. Los agentes detectaron tráfico de llamadas desde un terminal sustraído y lo rastrearon. Poco después localizaron a la persona que lo estaba utilizando, un hombre que fue detenido por un delito de receptación.

Posteriormente se localizó al supuesto autor de los robos, A. E., marroquí de 52 años de edad, que fue reconocido por el primer detenido como la persona que le había vendido el teléfono móvil.

El marroquí fue sometido a vigilancia y se tuvo constancia de que disponía de un domicilio que era utilizado como almacén.

Así las cosas, los agentes procedieron al arresto del presunto ladrón y realizaron un registro, con la correspondiente orden judicial, en el domicilio que usaba para esconder los efectos robados. Allí se localizaron los aparatos electrónicos y el reloj valorados en cerca de 15.000 euros.