Un equipo de nuestro diario sobrevuela en helicóptero durante 40 minutos la zona cero y capta imágenes dantescas del estado catastrófico de la Serra de Tramuntana. g Fotos: HUMPHREY CARTER

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Pasan unos minutos de las nueve de la mañana cuando un equipo de Ultima Hora se alza en vuelo en un helicóptero desde el aeródromo de Son Bonet.

El objetivo no es otro que visitar, desde el aire, el estado de la denominada zona cero del incendio declarado el pasado viernes en Andratx.

Tras sobrevolar unos 40 minutos la zona afectada el panorama es desolador. El color verde predominante en la Serra de Tramuntana ha dado lugar a un tono gris y negro.

Equipos de extinción
El vuelo de nuestro helicóptero se adelantó, por cuestión de minutos, al del primer hidroavión que realizó, en la mañana de ayer, sus primeras descargas de agua con la finalidad de proseguir con las labores de extinción.

A vista del pájaro las imágenes del efecto devastador del fuego no dejan indiferente a nadie. Lejos de estar apagado, el fuego, a pesar de estar estabilizado, sigue haciendo estragos en la zona y puede apreciarse conatos importantes de humo.

Los daños son cuantiosos, pero un detalle muy significativo que marca a todos los integrantes del vuelo es la falta de presencia de seres vivos. No hay vegetación y los animales autóctonos salvajes que vivían refugiados en la Serra de Tramuntana la gran mayoría se vieron sorprendidos por el fuego y fallecieron calcinados.

Nos acercamos, manteniendo la distancia de seguridad, hasta algunas de las viviendas que se han visto afectadas. Las mismas están completamente llenas de ceniza e inmersas, algunas de ellas, en columnas de humo.

El piloto de la empresa Sloane Helicopters, toma tierra de nuevo en Son Bonet y coincidimos con las brigadas contraincendios que, de manera paulatina, se van activando para acabar de luchar contra el peor incendio declarado en los últimos años en Mallorca.

A punto de cumplirse la primera semana del desastre medioambiental más importante que se recuerda en Mallorca en las últimas décadas, puede afirmarse que el fuego se encuentra estabilizado.

Previsiones

En este sentido, el responsable del operativo anunció que el incendio no se extinguirá hasta dentro de un plazo aproximado de unos ocho o nueve días, ya que una vez que se controle, se refrescará el perímetro, con el fin de que las llamas se puedan dar por apagadas a finales de la próxima semana.

En el lugar de la zona cero aún permanecen trabajando unos 230 efectivos terrestres y 13 medios aéreos, frente a los 400 y 29 respectivamente de días anteriores.

Una de las consecuencias del siniestro, es que la carretera entre Andratx y Estellencs permanecerá cerrada durante un tiempo indeterminado, debido a que hay desprendimientos permanentes, según han constatado los técnicos de carreteras. Hasta la fecha, unas mallas protegían a los conductores y evitaban que las rocas cayeran sobre la calzada.

Las llamas, sin embargo, han arrasado estas protecciones y ahora los desprendimientos son continuos. Incluso los vehículos oficiales también recibieron el impacto de piedras, algunas de gran tamaño.