La ambulancia que trasladó a la víctima en estado crítico hasta el hospital de Manacor. | Guillem Mas

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Un hombre de 53 años falleció ayer en el quirófano del Hospitald de Manacor tras ser apuñalado por un compañero de piso en el transcurso de una discusión en Porto Cristo. La víctima, Gabriel G.C., fue trasladada al centro hospitalario, donde fue operada de urgencia, y a última hora de la noche de ayer fallecía. El sospechoso, José A.L., de 55 años, fue detenido por la policía.

Los hechos ocurrieron pasadas las 18.00 horas en un primer piso de un bloque de viviendas de tres alturas situado en el número 1 de la calle Mestral, en la entrada de Porto Cristo. Al parecer, la vivienda pertenecía a Gabriel, que era natural de Suiza, y está en venta. El herido vivió con su madre en el domicilio hasta hace un año, cuando ella murió, y tenía alquilada una habitación a José.

Discusión

Ayer por la tarde ambos mantuvieron una discusión. En el transcurso de la disputa, José cogió un cuchillo de grandes dimensiones y se lo clavó a Gabriel en el pecho, muy cerca del corazón.

Gabriel tuvo tiempo de pedir auxilio por teléfono y en breve se personaron en el domicilio efectivos de la Unidad Teritorial de Costas (UTC) de la Policía Local de Manacor, Cuerpo Nacional de Policía y una ambulancia del 061.

Los agentes de la UTC fueron los primeros en llegar y encontraron a Gabriel malherido en la entrada y al agresor allí mismo. La víctima había perdido bastante sangre y llegó a entrar en parada cardíaca. Ante su estado crítico se optó por conducirlo hasta el hospital de Manacor en lugar de evacuarlo a Son Espases. Una vez en el centro, los médicos lo operaron de urgencia, aunque horas después se certificaba su muerte.

Arresto

Los agentes de la UTC detuvieron a José A.L. e intervinieron el cuchillo jamonero que supuestamente clavó a la víctima. Tanto el sospechoso como el arma fueron entregados al Cuerpo Nacional de Policía (CNP), que llegó al lugar de los hechos poco después y se hizo cargo de la pertinente investigación. Agentes de la Policía Científica estuvieron recogiendo pruebas en el piso hasta la noche con la finalidad de reconstruir los hechos y después precintaron la entrada. José A.L. ingresó en los calabozos de las dependencias del CNP a la espera de tomarle declaración en las próximas horas.

Los vecinos comentaron que la víctima y José «no son conflictivos, son gente corriente y muy amables», por lo que se mostraron sorprendidos ante lo ocurrido.