La Guardia Civil ha desmantelado este grupo organizado. | Marco Torres

TW
3

La Guardia Civil ha desmantelado en Palma una organización dedicada a estafar a grandes superficies y centros comerciales mediante la compra de bienes, con la detención de diez personas que se calcula que habrían defraudado en total unos 270.000 euros.

Las detenciones se llevaron a cabo el pasado 22 de mayo, en la primera fase de una operación denominada «Nueve Reinas», y tres de ellos, A.R.S., J.S.A. y J.C.P.P., ya han ingresado en prisión preventiva por orden del juzgado de Instrucción número 1 de Palma, ha informado hoy la Guardia Civil en un comunicado.

Se les acusa de los delitos de estafa, falsedad documental, fraude a la Seguridad Social y la Hacienda Pública, asociación ilícita y blanqueo de capitales.

La red utilizaba a personas de escasos recursos económicos con quienes formalizaba contratos ficticios. La organización utilizaba las nóminas y contratos falsos como aval en operaciones financieras para adquirir bienes, principalmente en grandes superficies y centros comerciales, y a cambio entregaba una pequeña comisión a los supuestos trabajadores.

Posteriormente la organización vendía a terceras personas los bienes adquiridos, de manera que las financieras y los establecimientos se quedaban sin los artículos y sin el dinero, ya que los tomadores de los contratos no pagaban las mensualidades.

En esta operación, la Guardia Civil practicó cuatro registros en los que recuperó bienes por valor de más de 120.000 euros entre los que destacan seis vehículos obtenidos fraudulentamente de concesionarios oficiales, maquinaria de cocina, diversas herramientas, material de construcción, aparatos tecnológicos, así como dinero en metálico.

La investigación, llevada a cabo por la Guardia Civil de Pont d'Inca con el apoyo de la Policía Judicial de Llucmajor, comenzó hace algunos meses y ha desembocado en la detención de la cúpula de la organización.

El equipo de investigación de la Tesorería General del Estado colaboró en la operación al corroborar que la mayoría de las empresas utilizadas por la organización eran ficticias.

Los supuestos empleados únicamente estaban dados de alta pero no realizaban ningún trabajo, de manera que además se beneficiaban de subsidios por desempleo.

La operación continúa abierta, y la Guardia Civil no descarta que se puedan producir más detenciones en los próximos días.