La policía detuvo a la acusada la misma noche de la agresión. | V. VASILEV

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El fiscal ha rebajado de doce a siete años y medio su petición de cárcel para una mujer por intentar matar con una inyección de salfumán a una rival sentimental en Palma.

La mujer está acusada de entrar en mayo de 2010 en casa de la otra mujer. La golpeó en la cabeza con un rodillo de cocina, la agarró por el pelo, la llevó a una habitación. Allí, según declaró la víctima le intentó clavar en la cara una jeringuilla con salfumán. La agredida consiguió evitar el arma y consiguió quitar a la atacante la media con la que se cubría la cara.

Los forenses que declararon ayer en la segunda jornada del juicio que la acusada padece un trastorno vinculado a los celos hacia su exmarido y a otros problemas personales. Esta situación, sin embargo, no le impedía ser consciente de lo que hacía cuando se produjeron los hechos, sobre todo porque fue una conducta planeada. Los médicos también aseguraron que la inyección de salfumán era potencialmente mortal en ciertas partes del cuerpo. En especial, apuntaron que si iba dirigida al cuello habría podido corroer algún vaso importante. Sin embargo, con las lesiones que sufrió la víctima, «no peligró su vida». La defensa, que ejerce el letrado Bartomeu Oliver solicita la absolución.