El operativo y la detención fueron practicados por agentes del Grupo de Investigación del aeropuerto. Fotos: ALEJANDRO SEPÚLVEDA | Alejandro Sepúlveda

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Agentes del Grupo de Investigación de aeropuerto de Palma procedieron, el pasado martes, a la detención del cabecilla de un peligroso grupo organizado acusado de estafar a compañías aéreas.

El pasado mes de enero, el Negociado de Fraudes de la compañía Air Berlín, puso en conocimiento de la policía española que habían detectado que un presunto estafador tenía previsto coger un vuelo internacional con escala en el aeropuerto de Son Sant Joan.

Rápidamente, los mandos policiales organizaron un importante operativo con la finalidad de proceder a su detención dado que, tras comprobaciones previas, los investigadores tenían constancia de que se trataba de un peligroso integrante de un grupo organizado de estafadores de Letonia. De hecho, la Policía Judicial de Barcelona le seguía los pasos desde hacía años. Nada más tomar tierra la aeronave en el aeropuerto palmesano, los agentes procedieron a su detención.

Falsificaciones

El arrestado responde a la identidad de Deniss Z., de 25 años de edad y, hasta la fecha, contaba con dos antecedentes policiales en el territorio español. Todos ellos motivados por estafa y falsificación.

El sistema utilizado por el cabecilla y su banda era el siguiente. El grupo disponía de una importante infraestructura dedicada a clonar, doblar y copiar tarjetas de crédito.

Con las falsificaciones se dedicaban a comprar billetes de avión, siempre de ámbito internacional. Una vez en el interior de los aviones, con tarjetas de crédito a su nombre, pero sin fondos y con la pertinente documentación en regla, los integrantes de la banda realizaban compras por valor de más de 1.500 euros. Los datáfonos (terminales de pago con tarjetas de crédito), a más de 3.000 metros de altura no tienen cobertura. Por consiguiente las azafatas no podían comprobar si las autorizaciones de la entidad bancaria es correcta.

Finalmente, cuando el aparato aterrizaba, unas horas más tarde, el datáfono detectaba que la tarjeta no tenía fondos.

La estafa total a la compañía asciende a más de 77.000 euros en género, especialmente en cartones de tabaco, perfumen de alta gama, cámaras de fotos y de vídeos.