El Grupo de Homicidios de la Brigada Provincial de la Policía Judicial se ha hecho cargo de las investigaciones.
Cualquier menor que tenga algún dato que aportar al respecto, puede ponerse en contacto con el citado grupo a través del teléfono de la centralita de la Jefatura, el 971 225 200, o directamente a la sala del 091, y pedir que le pasen con el Grupo de Homicidios.
Desde que la semana pasada este periódico informó de las detenciones de ocho personas relacionadas con la red, las investigaciones han continuado, a contrarreloj, para evitar podibles fugas de la Isla de personas que estarían relaciondas con el grupo.
Como ya se ha venido informando, el caso comenzó con la denuncia de los padres de una chica de 16 años que apareció muerta cerca de su domicilio particular, en septiembre del año pasado, en Palma.
En principio la muerte se atribuyó a una sobredosis, pero los padres infomaron a la policía de que veían algo 'raro' en el caso. Desde hacía un tiempo su hija disponía de un dinero del que ellos no tenían conocimiento de su procedencia y, sobre todo, su comportamiento se había transformado desde hacía un tiempo en el de una persona huidiza y, en ocasiones, agresiva.
Los agentes estuvieron recopilando datos y hubo momentos en los que parecía que el caso no tenía mayor trascendencia, hasta que al fin se pudo concretar, a nivel policial, la existencia de un grupo organizado que captaba a menores, las drogaba y posterioremente las prostituía.
Al llegar a este punto se tuvo conocimiento de la existencia de tres pisos en Palma y Calvià y se identificó y después detuvo a un total de ocho personas. Cada una de ellas se encargaba de distintas actividades dentro de la red, y todas ingresron en prisión el pasado viernes después de haber prestado declaración ante la autoridad judicial.
Tampoco se descartan más detenciones.
