Un momento de los registros practicados ayer en Son Gotleu. | Vasil Vasilev

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Son Gotleu siempre está en el punto de mira policial. En la noche de ayer, el Cuerpo Nacional de Policía llevó a cabo una gran redada en dos locutorios de esa barriada palmesana, que se saldó con algunos inmigrantes denunciados por estancia ilegal y la incautación de pequeñas cantidades de droga.

El operativo diseñado por la Jefatura palmesana se inició a las diez de la noche y duró hasta la medianoche. Participaron un total de 35 agentes, con siete coches 'Zeta' y dotaciones motorizadas ('Rayos').

Por sorpresa

La comitiva policial irrumpió en Son Gotleu por sorpresa y se dirigieron a la calle Santa Florentina. Desde allí, entraron en dos locutorios vecinos, regentados por inmigrantes extracomunitarios.

En total, fueron cacheadas e identificadas un total de cincuenta personas, que estaban en el interior de los dos establecimientos o en la puerta. Muchos de ellos eran «habituales» de estos negocios, en los que la Policía sospecha que se trapichea con droga. Tres de los sospechosos fueron trasladados a la Jefatura de la calle Simó Ballester, porque no llevaban documentación personal encima y la Policía quería comprobar su filiación. Otros cuatro fueron sorprendidos con pequeñas cantidades de marihuana y papelinas.

Durante el operativo en Son Gotleu, en el que los agentes iban fuertemente armados, numerosos vecinos y curiosos salieron a la calle para saber qué ocurría.