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La Policía Local de Palma rescató a una joven que intentó trepar hasta su casa, un segundo piso, a través de la fachada del edificio al quedarse sin las llaves. La mujer quedó colgada de la barandilla del balcón de su casa y pidió ayuda. Un policía la ayudó a bajar hasta el balcón del primer piso y después pudo bajar a la calle a través de esta vivienda.

Los hechos ocurrieron sobre las cuatro de la madrugada de ayer en la calle Socors, junto a los Juzgados de sa Gerreria. La Policía Local fue requerida en el lugar porque una persona creaba molestias, ya que estaba llamando desde la calle al portero automático de distintos pisos de forma insistente.

Patrulla

Una patrulla acudió al edificio y encontró a una joven agarrada a la barandilla del segundo piso. Un agente se subió sobre un furgón policial y ayudó a la joven a bajar hasta el balcón del primero. Poco después llegaron los bomberos para que la chica pudiese descender hasta la calle con un camión escalera.

Sin embargo, en esos momentos, los vecinos del primer piso, que estaban durmiendo y no habían hecho caso al timbre ni a los ruidos que procedían del exterior del domicilio, se despertaron y abrieron la puerta del balcón. Entonces vieron a la joven, a los agentes y bomberos.

La chica rescatada reside en el segundo piso. Al parecer, había salido a tomar unas copas y le robaron el bolso, por lo que se quedó sin las llaves de su casa. Al regresar, llamó a sus vecinos para que alguien le abriera la puerta pero nadie respondió a sus llamadas. Entonces decidió trepar por la fachada del edificio hasta su casa, pero no logró su objetivo.

La joven bajó de nuevo a la calle una vez que los vecinos del primer piso abrieron la puerta de su balcón. Como no tenía llaves y los bomberos estaban en el lugar, estos le abrieron la puerta de su domicilio y finalmente la joven pudo entrar en su casa.