Los acusados fueron detenidos por el Cuerpo Nacional de Policía. | Marco Torres

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Ajuste de cuentas de narcos colombianos a juicio. La Fiscalía pide penas que suman 45 años de cárcel para siete personas por delitos de tráfico de drogas y para varios de ellos por el secuestro de un hombre a raíz de una deuda por un cargamento.

Según el escrito de acusación, los hechos ocurrieron en el mes de mayo de 2010. Un grupo de colombianos tenía en Palma unos 400 gramos de cocaína. A través de intermediarios dieron la droga a un ciudadano español para que se encargara de vender la droga. Sin embargo, esta persona y una joven no pagaron la droga. Así, el grupo de colombianos decidió recuperar el dinero por la fuerza. El 22 e mayo de 2010 fueron de madrugada a casa de un hombre que conocía al que se quedó con la droga. Le preguntaron dónde estaba este individuo y, como el otro no se lo dijo, le llevaron en un coche hasta la gasolinera de la calle Aragón.

A la altura del establecimiento se unió a los dos que habían secuestrado al hombre otra persona, que golpeó fuerte a la víctima. Como seguía sin decirles dónde estaba su amigo, le llevaron a un bar de la calle Francesc Fiol i Juan de Palma. Allí volvieron a golpear a la víctima a la que al final llevaron hasta su casa. En total le tuvieron retenido durante cinco horas y, además de varios golpes le amenazaron en repetidas ocasiones de muerte: «Si se te ocurre salir o dar un grito, te mato, vamos a hablar de una vez o si no te corto la oreja».

A raíz de estos hechos, la víctima tuvo que abandonar su domicilio ante el miedo de volver a sufrir un ataque.

Unos meses después, en julio, el la policía realizó un registro en la vivienda de dos de los colombianos, en la calle Gabriel Font y Martorell de Palma. Allí encontraron unos 80 gramos de cocaína. En el momento de la identificación del acusado, la mujer de éste se negó a identificarse e hizo «caso omismo», según el fiscal de los agentes.

El juicio se celebrará la próxima semana en la Audiencia Provincial. El principal acusado, un colombiano de 32 años de edad se enfrenta a una pena de 19 años de cárcel.