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Los peores augurios se cumplieron ayer. Daniel Segura, el joven de 31 años que permanecía en estado de coma en Son Llàtzer a causa del incendio de la calle Manacor, falleció ayer en el hospital.
De esta forma, ya son dos las víctimas mortales del fuego que se declaró en aquel sexto piso el domingo por la tarde. El lunes fue su abuela, Magdalena Rodríguez, la que murió en Son Espases.
Los dos familiares fueron localizados en la casa en llamas sin constantes vitales, pero los ímprobos esfuerzos de los médicos consiguieron reanimarlos. Sin embargo, cuando ingresaron en sendos hospitales se confirmó que su estado era crítico y que las esperanzas de que tanto el nieto como la abuela se recuperaran eran casi nulas.
El siniestro de la calle Manacor ha sido el peor de los últimos años en Mallorca, con un trágico balance de dos víctimas mortales. El origen del fuego fue fortuito.