La detención la realizaron agentes del Cuerpo Nacional de Policía. | ultimahora.es

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Agentes del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de una mujer acusada de agredir, amenazar y encerrar durante cuatro días, sin comida, a sus dos hijos de 10 y 11 años en Palma.

La mujer, identificada como María M.R., de 32 años de edad y nacionalidad española, se separó hace dos meses de su pareja sentimental. Uno de sus hijos, de 16 años de edad, en el momento de la separación se marchó a vivir con su padre alegando que no soportaba a su progenitora y que había sufrido episodios violentos por parte de ella. El hijo mayor declaró ante la policía que en una ocasión su madre le había lanzado un cuchillo alcanzándole en uno de sus pies.

Relación insoportable

La mujer, a los pocos días de separarse del padre de sus hijos inició una nueva relación. Los dos hijos pequeños, de 10 y 11 años se quedaron con ella, pero a partir de ese momento la situación con los menores era insoportable. De hecho, recientemente, la mujer se marchó de casa, encerró a los pequeños en el interior del domicilio sin comida alguna y se marchó.

En un momento dado, la vecina del inmueble pudo escuchar a los pequeños llorar y pedir auxilio. A través de una pequeña ventana situada en el patio interior del edificio pudo ver a los niños pedirle auxilio y contarle que su madre les había encerrado, pegado (mostraban signos evidentes de la agresión) y que tenían mucha hambre.

La vecina, les hizo un bocadillo y les compró unos refrescos y, a través de la ventana se los entregó. Inmediatamente después se fue al bar donde estaba la madre, se la llevó al domicilio, hizo que le abriera la puerta y se llevó los niños con su padre.

Acto seguido, el progenitor en compañía de la vecina acudieron hasta el Cuerpo Nacional de Policía e interpusieron la pertinente denuncia.

Con suma rapidez, los agentes responsables del caso acudieron en busca de la madre y procedieron a su detención.

A la mujer se le imputan los delitos de abandono de menores, malostratos en el ámbito familiar y un tercer delito de detención ilegal.

A la arrestada le constaban dos antecedentes relacionados con reclamaciones judiciales.

Al realizarle los informes médicos los niños presentaban signos de haber sido agredidos.