Imagen de algunos de los objetos intervenidos a la banda de ladrones desarticulada por la Guardia Civil. | Alejandro Sepúlveda

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La banda desarticulada en la noche del miércoles cometió numerosos robos en casas de Mallorca y después blanqueaba los efectos robados en una joyería donde trabajaba una de las detenidas. Tal y como adelantó ayer en exclusiva Ultima Hora, la Guardia Civil ha detenido a siete implicados, ha registrado ocho domicilios y ha recuperado objetos, joyas y dinero sustraídos.


La Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia palmesana informó ayer de que la operación «Raspallón» se inició a raíz de los robos perpetrados en Santa María del Camí y Santa Eugènia.


Fines de semana


Los ladrones actuaban los fines de semana, en concreto los sábados por la tarde, cuando los dueños de las casas se ausentaban. Antes habían estado vigilando a los propietarios y conocían sus costumbres. Los asaltos se sucedieron en Santa Eugènia, Santa María del Camí, Lloseta, Palma, Inca, María de la Salut, Pina, Algaida, Binissalem y Consell.


En la tarde noche de ayer, la Policía Judicial de la Guardia Civil de Llucmajor y el cuartel del Pont d'Inca procedió a la detención de los marroquíes Hicham C; Akram E; Mimoun Y; Zahar J. y Charaf S., así como de los españoles Enriqueta S.J. y José A.B. Una de las acusadas trabajaba en una joyería y adquiría las joyas robadas en su casa. Utilizaba fotocopias de fichas de policía que firmaban los vendedores en blanco, y luego las revendía a su empresa por un precio más alto, blanqueado su procedencia.