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Una revisión pediátrica en Son Llàtzer ha sacado a la luz el caso de dos hermanas, de tres años y 15 meses, que han sido mutiladas genitalmente mediante ablación de clítoris. Las niñas y sus padres son naturales de Mali, pero residen ahora en Mallorca. La ablación se realizó en ese país africano, pero al tener constancia de los hechos, el Cuerpo Nacional de Policía de Palma detuvo al padre, Oumar S., de 38 años de edad, por un delito de lesiones. La madre, de 30 años, fue identificada pero no detenida ya que cuidaba a la niña pequeña, quien había sido hospitalizada tras sufrir un accidente doméstico. El caso ha sido investigado por el Servicio de Atención a la Familia (SAF) del CNP y está en manos del juzgado.

Fiebre

El padre residía en Mallorca desde hacía tiempo y a finales del año pasado su mujer y sus dos hijas viajaron a la Isla desde Mali para reencontrarse con él. Posteriormente la niña de tres años empezó a tener episodios de fiebre alta y el padre la acompañó a Son Llàtzer. El pediatra que realizó una revisión a la niña observó que le habían practicado la ablación del clítoris, por lo que se tramitó un informe al juzgado. Después los hechos fueron comunicados a la policía, que inició una investigación al respecto.

Los agentes localizaron a los padres. El hombre fue detenido por un presunto delito de lesiones y la mujer fue identificada, pero no detenida ya que cuidaba a la hija pequeña, quien estaba ingresada.

Oumar dijo que sabía que sus dos hijas estaban mutiladas genitalmente y aseguró que la ablación se realizó en Mali. Afirmó que tuvo conocimiento a posteriori porque su mujer se lo contó por teléfono y que no le consultaron nada previamente. Sobre su hija de tres años, dijo que la ablación se realizó hace un año y medio aproximadamente, y respecto a la pequeña, que se practicó la ablación hace unos meses. Oumar manifestó que esta práctica era muy frecuente en su país.

Acerca del hecho de que no fue consultado sobre la ablación, Oumar explicó que cuando vino a Mallorca, sus mujer e hijas quedaron a cargo de su padre, es decir, el abuelo de las pequeñas, que fue la persona que tomó la decisión de practicar la mutilación genital a las niñas, y se da la circunstancia de que ahora esta persona ya ha fallecido.