Agentes de la Guardia Civil, ayer al mediodía junto a una nave del polígono de Can Valero. | Alejandro Sepúlveda

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Operativo de la Guardia Civil contra la venta ilegal de chatarra y cobre en Palma. Numerosas patrullas de la Benemérita se desplegaron ayer en el polígono de Can Valero e identificaron a decenas de vendedores en busca de material ilícito o que incumplía la normativa de seguridad.

El despliegue, en el que participaron cinco vehículos patrulla de la Comandancia palmesana, se inició al mediodía y estuvo coordinado por el Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza). De forma paralela, la Policía Judicial investiga el robo masivo de cobre y el supuesto delito de receptación en el que podrían estar incurriendo algunos particulares que compran ese material. Con estos dos frentes abiertos se pretende erradicar o al menos controlar la venta masiva de chatarra que procede, en muchas ocasiones, de robos o hurtos en casas y alumbrado público.Los agentes del Seprona desplegados ayer en el polígono se colocaron en la entrada principal de una empresa del polígono e interceptaron a muchos vendedores que se disponían a vender el material que habían almacenado. Los agentes interpusieron algunas sanciones económicas y muchos de los vendedores se apresuraron a aclarar que eran «insolventes».

En algunos casos, los agentes comprobaron que los vendedores identificados regresaban al cabo de poco tiempo al polígono, arrastrando carritos cargados de material o al volante de vehículos cargados con chatarra. La Benemérita, en todos los casos, trató de aclarar la procedencia de esos efectos.

Algunos vendedores se quejaron de que ellos se ganaban la vida «recogiendo todas estas cosas, pero los que las roban son otros, como las mafias de rumanos». Los investigadores tienen constancia de que algunos de los asiduos del polígono están ganando grandes cantidades de dinero con sus visitas diarias a algunas naves de la zona. El operativo sólo acaba de comenzar y está previsto que se realicen numerosas gestiones en los próximos días. De las sanciones del Seprona se podría pasar a detenciones de la Policía Judicial, tanto por receptación de la chatarra ilegal como por robo de ese material.