Francisca Cortés Picazo, durante el juicio del 'caso Son Banya' por el que tendrá que cumplir 12 años. | Alejandro Sepúlveda

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'La Paca' tomó las uvas en la prisión de Zaragoza con una certeza y dos dudas. Sabe que tiene que cumplir 12 años de prisión por el secuestro de tres paraguayos en Son Banya y el pago de un soborno a un inspector de la Policía Nacional. Pero esa cuenta puede subir, y mucho, según terminen las dos causas que la matriarca tiene abiertas en los juzgados de Palma: por la 'operación Kabul' y por el 'tesoro de Son Banya'.

Pese a que el Tribunal Supremo ratificó en su sentencia hecha pública el pasado día 28 de diciembre que Francisca Cortés Picazo es una reconocida narcotraficante, 'La Paca' no ha sido aún condenada por narcotráfico. En su historial tan solo consta un antecedente por delitos contra la salud pública. Una condena menor por tráfico de hachís de hace una veintena de años. Eso puede cambiar con el macrojuicio por la 'operación Kabul'. En total son 63 los procesados en la causa que se encuentra al final de su instrucción. Tras el auto de procesamiento, dictado por el juez en octubre de 2009, el caso se ha prolongado en una maraña de recursos contra varias escuchas telefónicas y el propio procesamiento. Este año debería finalizar el proceso y, de hecho, la Audiencia Provincial ya tiene preparado un lugar para celebrarlo. Se trata de las instalaciones de la Escola Balear d'Administració Pública (EBAP) en el polígono de Son Rossinyol de Palma. El elevado número de procesados por delitos de tráfico de drogas, receptación de material robado y tenencia ilícita de armas hace imposible que se celebre en el palacio de Can Berga. La nueva sala, que está prácticamente acondicionada, ya servirá para otros procesos de esta magnitud.

El tesoro

La causa surgió tras una gran operación en la que la Guardia Civil incautó más de diez kilogramos de heroína, ocho de cocaína y otras drogas. El juez ha requerido una fianza de seis millones de euros a los imputados.

La otra causa pendiente sobre 'La Paca' es la que le vincula con el 'tesoro de Son Banya'. La investigación arranca con el hallazgo en un anexo a su vivienda del poblado un zulo en el que había un total de 4,3 millones de euros. La matriarca se ha negado a declarar en esta causa. Sin embargo, la investigación ha avanzado durante más de un año en el entramado financiero del clan. Uno de los aspectos claves fue la detención de 'Lourdes', una de las personas de máxima confianza de la matriarca. A parir de ahí se han desentrañado cuentas corrientes y propiedades inmobiliarias en la pieza principal de la causa, que no la única. En el mes de noviembre, a través de varias escuchas telefónicas se llegó a la detención de Antonio Palazón, ex policía local de Calvià y presidente de una ONG. Esta asociación tuvo dados de alta a 'La Paca' y a su marido en la seguridad social y en sus cuentas se ingresaron unos 70.000 euros cuya procedencia podría estar vinculada con dinero del clan.

En la causa, Francisca Cortés está imputada por delitos de blanqueo de capitales, el mismo por el que el Supremo la absolvió la semana pasada al considerar que sus pagos a la abogada María de los Angeles López Calderón y al policía José Gómez, 'Pepote' no constituían este delito. Eso sí, en el año 2006 ya se conformó a una pena de unos 20 meses por un delito de blanqueo. En aquella ocasión no llegó a ingresar en prisión. Ahora, desde la celda espera otros dos juicios.