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Treinta y ocho trabajadores de General Motors (GM) han resultado heridos, doce de gravedad, cuando, tras terminar el turno de noche, volvían a sus casas en un autobús que cayó a un carril inferior situado a unos seis metros de altura, junto a la estación intermodal Delicias de Zaragoza.

Según el diagnóstico médico, doce de los heridos están graves, ocho de ellos ingresados en la UCI de distintos centros médicos, dos menos graves, otros catorce tienen pronóstico reservado y diez leves, cuatro de los cuales ya han sido dados de alta.

Casi todos presentan traumatismos de diferente consideración y, las heridas son fundamentalmente fruto de contusiones y fracturas, así como alguna lesión medular, en el cráneo o en la cadera.

La consejera de Sanidad del Gobierno aragonés, Luisa María Noeno, al hacer un balance provisional del estado de los heridos, ha dicho que «es conveniente esperar», al ser preguntada sobre si se temía por la vida de alguno de ellos.

El siniestro, que se produjo a las 06,35 horas y movilizó a decenas de vehículos y miembros de los cuerpos de socorro de la ciudad, ha sido impresionante, ha dicho la consejera, pero no ha tenido consecuencias fatales, ya que no ha habido fallecidos.

Los 38 trabajadores que viajaban en el autobús han resultado heridos y han sido evacuados con rapidez, según ha destacado la consejera, quien ha valorado la buena coordinación que ha habido entre todas las administraciones implicadas.

Los heridos se encuentran en los hospitales Clínico (11); Miguel Servet (10); Royo Villanova (7); Clínica Quirón (4); Clínica Montpelier, otros cuatro (en planta), uno en la UCI de la Mutua de Accidentes de Zaragoza (MAZ) y otro en la Clínica Montecanal.