Los dos acusados durante el juicio celebrado ayer en la Audiencia de Palma. | ALEX SEPULVEDA

TW
1

La Sección Segunda de la Audiencia de Palma dejó ayer visto para sentencia el juicio -repetido a instancias del Supremo- contra los padres de un menor acusados de delito continuado de abuso sexual cuando el niño tenía entre cuatro y nueve años, en grado de autor material el padre y de autora -en comisión por omisión- la madre. La fiscal y el acusador particular piden diez años de presidio para el progenitor y cinco para la mujer, que tiene diagnosticada esquizofrenia paranoide. La defensa de ambos pide su absolución por falta de pruebas.

El juicio celebrado ayer contó con el testimonio por videoconferencia del menor, hoy de 14 años de edad, que tras su paso por dos centros de tutela del Consell de Mallorca vive ahora en acogimiento con sus abuelos maternos.

Testimonios

La sesión judicial fue prácticamente un calco de la celebrada en 2008 en la Sección Primera de la Audiencia, al deducirse testimonio de los acusados; del menor; de los trabajadores sociales y rectores de los centros públicos de acogida -en los que ingresó en 2005 por desatención parental- y de los peritos que elaboraron y supervisaron el informe psicológico elaborado tras el testimonio del niño en el que relató cómo su padre lo habría sometido a tocamientos y luego le habría requerido para que le masturbase y practicase felaciones, entre otros actos de índole sexual y siempre en el domicilio familiar.

En todos los testimonios periciales se puso de manifiesto que el niño padeció típicas secuelas del abuso sexual, entre ellas la encopresis secundaria diurna (falta de control del esfínter anal) a una edad superior a los cinco años.

Los acusados negaron tajantemente haber cometido abuso sexual sobre su hijo por acto u omisión. El padre señaló que «miente, o alguien le come el coco», y la madre afirmó que es «un fabulador».