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Un juzgado de Palma ha condenado a seis años y nueve meses de prisión a un aparcacoches que atracó a tres mujeres en un cajero automático de plaza de Espanya. El condenado empleó una jeringuilla para amenazar a las víctimas. En el juicio, dos de las mujeres asaltadas y un testigo reconocieron sin ningún tipo de duda al acusado como el hombre que las asaltó. La sentencia condenatoria ha sido ya recurrida por la defensa del aparcacoches. Este recurso ha sido desestimado por la Audiencia Provincial de Palma que ha reafirmado la pena.
Los hechos ocurrieron en noviembre de 2009. El acusado se mantenía oculto en el interior del cajero. Allí esperaba a que entraran sus víctimas, a las que amenazaba con una jeringuilla. En su primer asalto amenazó a una mujer que sacó 70 euros del cajero con los que se quedó el acusado. El segundo atraco, que se produjo a las siete de la tarde fue frustrado por un guardia civil de paisano.
Guardia Civil
El agente pasaba por delante de la entidad bancaria y vio algo extraño en el interior, por lo que abrió la puerta. El atracador salió corriendo. En el último de los atracos, el acusado abordó a una mujer que iba acompañada de su hija de dos años. Una vez que la víctima había introducido la tarjeta en el cajero, salió con la jeringuilla y amenazó a la mujer y a la niña. De ese atraco también obtuvo 70 euros. El acusado fue detenido unos días después por agentes del Grupo de Atracos del Cuerpo Nacional de Policía. En el juicio, el acusado negó con vehemencia haber cometido los hechos. De hecho, estuvo muy inquieto y apostilló de forma airada cada vez que un testigo le reconocía como el autor de los hechos: «¡Esto es una conspiración!», llegó a afirmar.
Su defensa recurrió la sentencia del juzgado de lo penal ya que consideraba que la magistrada había valorado mal la prueba. La Audiencia rechaza que existiera tal error y señala que la condena «no ha sido arbitraria, ni caprichosa, ni absurda».