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La Policía Judicial de la Guardia Civil ha detenido a tres menores que propinaron una brutal paliza a dos homosexuales que se estaban besando junto a una discoteca del Port d'Alcúdia.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del 15 al 16 de mayo, durante el fin de semana, aunque la Benemérita tuvo conocimiento de lo ocurrido días después, cuando las víctimas interpusieron las correspondientes denuncias en el cuartel.
Según explicaron los dos varones agredidos, de unos 25 años, fueron atacados por un grupo de al menos tres muchachos, que les insultaron gravemente y les humillaron por su condición sexual, ya que son pareja.
Paliza
A continuación, les propinaron puñetazos y patadas y una de las víctimas quedó inconsciente. Antes de huir, los agresores lanzaron piedras contra los coches de los dos apaleados, provocándoles daños materiales.
El joven que perdió el conocimiento fue evacuado hasta el hospital de Inca, donde comprobaron que había sufrido una fuerte conmoción cerebral y lo tuvieron en observación. El otro lesionado, cuyo estado no era tan preocupante, también fue atendido en un centro médico, pero no fue necesario hospitalizarlo. Presentaba moratones y heridas en distintas partes del cuerpo.
La investigación policial no se inició ese mismo día, ya que la pareja no denunció hasta que no estuvieron relativamente recuperados de sus lesiones.
El miércoles, la Guardia Civil del cuartel del Port de Pollença, tras varios días de intensas gestiones, consiguió localizar a los tres implicados, que ya estaban identificados.
Se trata de tres muchachos de origen uruguayo, de 17 años -dos de ellos- y de 15, que residen en la zona y que ya habían tenido algunos problemas con las fuerzas del orden. Dos de ellos tienen la nacionalidad española, según informaron las fuentes consultadas. Los tres han quedado en libertad con cargos, debido a su edad, y sus respectivas familias han sido informadas de las imputaciones que recaen sobre ellos.
Los agentes también han tomado declaración a algunos testigos de la paliza, que se encontraban a las seis de la mañana en el aparcamiento de la discoteca del port d'Alcúdia, cuando ocurrieron los hechos.
Los dos jóvenes apaleados se están recuperando de sus lesiones -a uno de ellos tuvieron que aplicarle varios puntos de sutura-, pero se encuentran muy traumatizados por el violento episodio vivido.