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Un colombiano de 38 años ha sido expulsado a su país tras cumplir una condena de dos años de cárcel, que le fue impuesta por abusar de una niña de 12 años en Palma, en el año 2007, y estar en posesión de pornografía infantil. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía acompañaron hace dos días hasta su país al procesado, Alexander L.Y., para asegurarse del cumplimiento de la orden de expulsión que también pesaba sobre él.
Los abusos se cometieron a finales de junio de 2007. La menor regresaba a su casa después de haber estado en un comercio cuando el conductor de un turismo le preguntó si sabía dónde había una clínica veterinaria y después le pidió que lo acompañara, accediendo la niña. Después el procesado le dio 10 euros y al despedirse le dijo que le diera un beso en la mejilla, pero al ir a hacerlo el varón le besó la boca.
Al día siguiente esperó a la niña en la calle frente a su domicilio. El detenido le dijo que era fotógrafo y le pidió que lo acompañara. La menor subió al coche y se dirigieron a la zona de Portopí. Allí le dijo que le iba a hacer unas fotos y que se desnudara. La menor en principio se negó, pero el hombre le quitó la camiseta, después ella se desnudó y el varón le tomó una serie de fotos de sus partes íntimas y le efectuó tocamientos. A continuación la acompañó, le dio 30 euros y su número de teléfono y le pidió a ella el suyo particular. La madre de la niña, tras recibir una llamada sospechosa y encontrar los 30 euros a su hija, descubrió que pasaba algo y denunció los hechos ante la policía.
Detenido
A principios de julio de 2007 fue detenido Alexander L.Y., quien ya tenía antecedentes por haber abusado de otra menor en 2001 y pesaba sobre él una orden de expulsión. El juez de guardia ordenó el ingreso en prisión provisional de Alexander.
Cinco meses después salió de la cárcel y se celebró el juicio en su contra, en el que fue condenado a dos años de cárcel. Pero por un acuerdo, que ratificó la acusación particular, se suspendió la condena.
Posteriormente se ordenó su ingreso en prisión para cumplir la sentencia, pero no se localizó al condenado, el cual estuvo más de tres meses huido de la Justicia. Finalmente, en julio de 2008 la policía detuvo al colombiano en su casa de Marratxí. Alexander ingresó en prisión para cumplir la condena. Ahora, una vez que ha cumplido la pena ha sido expulsado de España.