Vecinos de las zonas conflictivas de Palma por la presencia de
prostitutas callejeras se pusieron ayer en contacto con este
periódico. En general todos mostraron su malestar e indignación por
haber dejado en libertad a trece de las chicas que fueron detenidas
el pasado mes. En la Platja de Palma, además de lanzar duras
críticas contra el auto judicial, se informó que representantes de
la Asociación de Hoteleros y de la Plataforma Antidelincuencia
están ultimando los detalles para ser recibidos en Madrid, el
próximo mes de septiembre, con los ministros de Interior y de
Justicia.
Desde los citados colectivos se pretende trasladar el clima de
crispación que se vive en la zona, y pedir explicaciones sobre un
auto judicial que perjudica sus intereses y, además, es contrario a
otro auto judicial y a una instrucción del Fiscal General del
Estado. Por otra parte, un residente en la zona de las Avenidas
manifestó su indignación por el auto y expresó asi su opinión: «Se
dice que nuestra legislación en materia de extranjería es muy
garantista...¿para quién?.
Bastante están saturados los juzgados con temas civiles,
penales, sociales y demás para que les añadan temas de extranjería
que, al fin y al cabo, se trata de un tema más bien
administrativo». Esta persona añade que tanto en la Comunidad
Europea, y sobre todo en EE UU, el tema de la inmigración ilegal es
exclusivo de la administración policial, y la prostitución en la
vía pública se castiga penalmente».
Otro vecino, de la zona de Cas Capiscol Amanecer, lamenta el
auto y señala que «si las actuales leyes no sirven a la mayoría de
la sociedad, supongo que habrá que modificarlas porque los
ciudadanos no podemos ser de manera constante víctimas de los
comportamientos anómalos de una minoría y sin que nadie le ponga
remedio».
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