user AntiSistema | Hace un año

Para esto si que amplían el presupuesto, patético

user FJavier61 | Hace un año

Añadir que es la misma empresa que reparte los distintivos ORA renovados que muchos ciudadanos no han recibido después de meses de haberlos pagado. Muchos de ellos están siendo multados

user Lectora | Hace un año

Si m'hagués ocorregut a jo i me desestimàssin el recurs per via administrativa, miraria de posar- me en contacte amb tots els afectats que pogués, per demandar judicialment a l'Ajuntament i a l'empresutxa incompetent que ha fet aquest desastre És el que jo, que som lliure i que no estic fermada a cap partit polític, tractaria de fer.

user Pablo | Hace un año

Ahora tienen más presupuesto, conseguido con los recargos a los ciudadanos. Negocio redondo.

user Solagne | Hace un año

La noticia no alude a que cientos de residentes tienen embargada su nómina porque han visto triplicadas sus multas. De 100 a 300 euros. El motivo, no es la falsificación como dice la noticia, sino la falta de notificación. En el expediente consta una falsa geolocalización del domicilio del infractor, que corresponde a la propia sede de CI POSTAL. Esta geolocalizacion falsa, sirve de prueba al Ayuntamento. Llegado el momento pasa al negociado de la ATB, Sr. Alzamora-ver historial google-y comienza la vía ejecutiva y el embargo. Con un % para el bolsillo del citado Sr. Resumen: DELITO .

user Lectora | Hace un año

La solució no és substituir l' empresa, sinó tornar a internalitzar el servei. Tot s'arreglaria amb menys assessors, que en el millor dels casos no serveixen per a res, i més treballadors que facin bé la seva feina. Perque amb el que guanya un adjunt polític enxufat a dit, que va de "jefe" i que vol comandar sobre els que són de plantilla que saben més que ells, se poden pagar dues nòmines i mitja d'uns treballadors de veritat, que facin feina de profit i que serveixin de veritat als ciutadàns. I amb aquesta mania de ficar gent externa a dins de les institucions, son iguals tots els partits.

user mixeta | Hace un año

600 euros me piden por dos multas que entregadas correctamente me hubieran costado 100 euros en total. Lo tengo recurrido pero me huelo como esto acabará.

user logan | Hace un año

Todo esto crea dudas: La nueva adjudicataria, ¿No será la misma empresa con otro nombre? ¿Cómo se puede ir de rositas una empresa que ha incumplido aquello para lo que fue contratado y sobre todo, que ha provocado sanciones, recargos, intereses y embargos, y que ahora son los ciudadanos los que lo han de demostrar, con este ayuntamiento prepotente que tenemos? ¿Cuánto recauda en multas para poder 5,2 millones sólo por repartirlas? ¿Alguien ve algo distinto a un salvaje AFAN RECADUTORIO de la administración?

user Johnny Melavo | Hace un año

O sea, a ver que lo entienda yo... ¡no hablan de devolver el importe cobrado ilegalmente! ¡Sólo quieren recaudar más!

user Cococolas | Hace un año

Buenos días. En los concursos de adjudicación, antes de proceder a la licitación de cualquier contrato, es imprescindible poseer un conociento claro del mercado de lo que se saca a concurso. Además hay que hacer uso de dicho conocimiento estrictamente desde el punto de vista técnico; ideologías las justas como criterio. El criterio expuesto es válido tanto para servicios como para proyectos. Hace falta para cribar todas aquellas ofertas que no son creibles. Después de este cribado empieza el concurso real. Téngase en cuenta que, cuando alguien hace una oferta aparentemente imposible; una de tres o se trata de un error (no nos conviene), o se trata de ignorancia por falta de preparación (nos conviene aún menos), o se trata de tirar precios por debajo del mínimo de mercado para entrar en la cartera de clientes sea como sea, incluso echar irreversiblemente a otra empresa del mercado (no es legal). En cualquier caso, se trata de evitar que llegue a firmarse contrato con "alguien" que no va a cumplir en el peor de los casos, y en el mejor cumplirá pero en la siguiente licitación nos lo combrará con creces al haber eliminado a la competencia. Personalmente creo que, las personas que licitaron el contrato de reparto no lo hicieron como es debido. El problema es que en política parece que esto no tiene más recorrido que la que se refleje en las urnas. En cualquier empresa privada sería demoledor para el licitador. Ahora permitanme pensar que, la administración que se hace desde los políticos es, como se dice en mallorquí, "can seixanta". También valdría lo de: Qui amb al•lots se colga, compixat s'aixeca". Con ello pienso en los afectados (ciudadanos), y el los que los votaron (otros ciudadanos). Ojalá los afectados sólo pertenecieran al grupo de votantes de estos licitadores, pero desgraciadamente la afectación de las consecuencias es indiscriminada. Un saludo.