|
Hace más de 2 años
El sentido común y la decencia es lo que falta. Nos tratan como a borregos. Administraron la primera dosis de AZ y a algunos incluso la segunda, de forma imperativa, sin posibilidad alguna ni de elegir ni de rechistar. Ahora, por los motivos que sean, ninguno ni científico ni médico, nos imponen la segunda de pfizer tras la primera de AZ, y además nos hacen firmar un CI para lavarse las manos y sobre todo coaccionar y asustar, cuando precisamente lo pautado son las dos dosis del mismo suero, AZ. ¡Qué poca vergüenza de políticos!
Esto cambiaría si la mayoría de la gente presentar una reclamación qué tienen la obligación de tener hojas de reclamación para los pacientes. En mi caso pondría qué hago responsables a las autoridades competentes de las consecuencias que pueda derivarse tanto del retraso en mi vacunación como de mi vacunación. Debido a que hay unos plazos recomendados por el fabricante de cada vacuna para administrar la segunda dosis de forma efectiva que modificar dicho plazo por la Administración puede resultar en una merma de efectividad de la vacuna en cuyo caso si me contagio hago responsable a las autoridades competentes qué decidieron modificar dichos plazos. Qué el fabricante no da garantías respecto la mezcla de vacunas por tanto la responsable de ese experimento es la autoridad competente qué haya autorizado eso en la población general como sistema preferente. Que las autoridades competentes no me dieron en su momento la oportunidad de elegir qué vacuna quería siendo ellas los que dictaminaron AstraZeneca para mi caso particular. Que si consideran que AstraZeneca ya no es segura en ningún caso debo firmar ningún consentimiento si no que me deben vacunar con una dosis completa en el caso de Janssen y con dos dosis en el caso de Pfeiffer y moderna. Y no dejarme a mitad retos procesos de vacunación distintos ya que eso no da garantías ni de una protección adecuada ni de posibles interferencias o duración de la protección por los fabricantes de las propias vacunas