Els llebrers hi feïen molta més avia per encalçar la llebre, en aquest lloc.
La responsabilidad de la vigilancia de deterioro de la obra puede que sea de la “empresa adjudicataria”. Pero la responsabilidad de que la tal empresa cumpla con su obligación es, totalmente, del Ayuntamiento, Sr.Horrach. Como corresponde a quien paga al adjudicatario y más si se hace con el dinero de nuestros impuestos. Quizá no recuerde Ud. que el dinero público no cae del cielo sino del esfuerzo de los contribuyentes Así que no eche balones fuera y asuma su mala gestión en una obra tan necesaria como carísima para los ciudadanos, que por dejadez ya está deteriorada antes de que finalice y se inaugure
Casualidades aumenta el máximo que permite la ley. Se deben llevar mínimo el famoso 3%, más lo que costará reparar actos vandalicos por no acabarlo a tiempo
Ha ja ja ja ja ja ja ja ha ja ja ja
Me sorprende que los imprevistos sólo hayan representado un sobrecoste del 20%, me imagino que ya habrá otros imprevistos que lo suban al 70 u 80% en los que ya estamos acostumbrados pero bueno, que no se mortifiquen por estas pequeñeces, que para eso estamos los ciudadanos y ya pagaremos de una u otra manera, al fin y al cabo si no ¿Para qué trabajamos?
Y en el velódromo okupas, collonut tot.
Horrach admite que la responsabilidad de su seguimiento es de la empresa adjudicataria y que se ha pedido que la Policía Local vaya de vez en cuando. Sr. Horrach el que debe pedir responsabilidad a la empresa adjunicataria es usted que para eso le pagamos y respecto a la Policia Local me parece ridículo eso de que de vez en cuando. Espero que la reparación, eliminación de pintadas y arreglos vayan a cargo del responsable de tal situación. NO CON NUESTRO DINERO.
Un imprevisto, rebaja el presupuesto. Los otros dos lo aumenta, pero no deberían haber sido imprevistos ya que los que ha salido a la luz deberían haberlo contemplado en el plan de la obra. ¿O no se sabia que por allí pasaba la acequia o no se veía el mal estado de una pared?.
Criticaba y pedían dimisiones con toda la razón de este mundo por los desastres del Palma Arena, el Palacio de Congresos, y otro sin fin de desaguisados, ahora son esos, la verdad no hay ni un político con un mínimo de vergüenza, ni uno tiene la decencia de dimitir
Hace falta un plan integral, por ejemplo que Institutos y UIB adecenten fachadas y limpien pintadas. El sector público debería dar ejemplo.