Distintas imágenes del lugar en el que estaba la jeringuilla. | Sergio Estébanez Rodríguez

En uno de mis paseos fotográficos por el bello Passeig Marítim de Palma, que me acoge, me encuentro con una jeringuilla. Es una vergüenza y un peligro para niños y animales que vayan solos por el paseo.