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Un papa odiado por parte de los católicos

Torres BlascoPalma24/04/25 4:00

Este era un papa bastante odiado por una parte de los católicos. De eso te das cuenta leyendo algunas de las cosas que se van publicando por ahí. Lo llaman de todo también después de muerto. El papa Bergoglio, el papa Francisco, ha esperado a morirse, o a salir de escena, para el final de la Semana Santa, después del Domingo de Resurrección. Algo tiene que significar, igual es un mensaje.

Posiblemente era este papa lo más parecido a la última referencia para estos tiempos tan desquiciados donde dominan liderazgos que dan miedo. También este papa pudo sentir deseos de ponerlo todo, o al menos una parte, patas arriba. Y qué hipócritas suenan ahora algunos elogios de quienes, en el fondo, desprecian su manera de ser y no coincidían ni en el fondo ni en la forma. Sí, el papa Francisco parecía tener claro cuál era la mirada correcta. Ante los migrantes por ejemplo.

Muy alejada, por cierto, de algunas posiciones que defienden supuestos cristianos y cristianas de por estas tierras. A este papa le han llamado comunista y dictador. Ha sido el papa de las personas pobres y de quienes viven en el lado de la miseria. Qué curioso ver ayer libros sobre el papa en los tenderetes y puestos que se montaron para Sant Jordi. Entre ellos, su biografía y también el libro de Javier Cercas, ese que se llevaron a casa políticos de izquierda y que debieron obviar quienes se sitúan más a la derecha.

Cercas aceptó escribir el libro –o eso cuenta, pero también los escritores se montan sus propias películas– con la condición de poder preguntarle al papa si existía la vida eterna, la resurrección de la carne y esas cosas y si su madre, la del escritor, iba a reencontarse con su marido en el más allá. Algo habrá significado que el papa salga de escena una Semana Santa. Bueno, y que Vargas Llosa lo hiciera relativamente cerca del Día del Libro. Pero esa es otra historia.