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Estamos acercándonos al famoso día 9 de mayo, el día de la Victoria del ejército Rojo sobre el nazismo. Fueron los rusos quienes entraron primero en Berlín y en hacerse con los restos del cadáver de Adolf Hitler, actualmente en paradero desconocido , pues una parte fueron esparcidas sus cenizas en una zona de la que no sabemos el lugar, y pedazos de su cadáver en los sótanos de un centro documental dirigido por los servicios especiales de Inteligencia rusos, antes KGB.

Cada año, desde entonces, la plaza Roja de Moscú es escenario de ese triunfo contra el nazismo y un gran desfile de fuerzas militares ofrecen a los ciudadanos rusos toda una idea de lo que significan las fuerzas armadas y el orgullo de pertenecer a la sagrada gran Madre Tierra Rusa. Algo que los eslavos llevan en lo más profundo de su ser pero que a los demás países occidentales nos cuesta entender.

Ahora ha llegado el día de la verdad, de demostrar al mundo que Rusia no podrá ser nunca vencida y está orgullosa de su armada militar. Y ahora es el momento de acabar con esa piedra en la gran bota que significa Ucrania y los demás países que la apoyan dándoles armas que, lo único que lo gran, es alargar la lenta agonía de un pueblo, el ucraniano, dividido entre los nacionalistas de corte neonazi como el batallón Azov, que ponen a civiles en Kiev como escudos humanos, y los ciudadanos prorusos de la zona del Donbass, Mariúpol, etcétera.

Putin venía avisando que el genocidio de prorusos desde el 2014 tenía que acabar, y nadie en occidente le escuchó. Al igual que nadie sabe Zelenski posee 850 millones de dólares en paraísos fiscales. Estados sometidos a la economía liberal impuesta por el imperio norteamericano y los grandes destructores de naciones como los Soro, en primer lugar, seguidos por los banqueros desde Gran Bretaña, Irlanda y Canadá, los Rotschild y los Rockefeller. Esta verdad a nadie ha interesado descubrirla pues los medios de prensa y comunicación están en manos de estos billonarios sin escrúpulos y, la victoria sobre el prestigio y la imagen de Putin es la primera victoria de estos grupos que manejan al chico de los recados, al hombre que les sirve el café, llamado Joe Biden. Por eso se amañaron las elecciones en las que Biden, aparentemente, triunfó sobre Trump, un hombre que caerá mal pero que se llevaba bien con Putin porque ambos son dos machos alfa y saben que la economía, tal y como está montada hoy en día ,tiene sus días contados. Con Trump esta guerra jamás habría sucedido.

Quienes conocen a Putin saben que no tiene madera de perdedor, y los que sabemos de lo que ha sido capaz EEUU a lo largo de su historia, mintiendo, rompiendo acuerdos y su palabra, creando guerras ficticias y Estados fallidos, los únicos que han lanzado bombas atómicas sobre poblaciones como Hisoshima y Nagasaki, creadores de armas biológicas, etc...sabemos son capaces de hacer ataques de falsa bandera para demonizar al enemigo y destruirlo. El día 9 es el plazo con el que cuenta Putin para demostrar al mundo que no se puede, ni debe, ningunear a Rusia. Y sobre todo demostrar al pueblo ruso que la victoria, cuesten las vidas que cuesten, merecerá el sacrificio.

Yo intuyo la guerra empezará primero con ataque con misiles termonucleares pero sin carga atómica. Después, tras ese primer aviso, y según la respuesta de la OTAN, se efectuará otro ataque similar con armamento biológico y químico, así hasta tres avisos. Y después, el golpe mortal, lanzando sus cohetes Satán II con carga nuclear donde el mundo ya no tendrá vuelta atrás, donde el mundo, tal y como lo conocemos, no volverá a ser el mismo y amplios territorios serán incapaces de albergar vida tras la lluvia ácida que lo contaminará todo. Y da igual si asesinan o muere Putin, porque esto va más allá de la idea del presidente ruso. China conquistará otra vez Taiwán, y luego los millones de chinos arrasaran como Gengis Khan, toda Europa. Oriente invadirá occidente y una nueva economía, unos nuevos modos de reglas del juego aparecerán destruyendo la economía liberal de libre comercio y libre mercado, obsoleta definitivamente.

Quienes lean mi artículo, no crean estoy a favor de lo que nos viene encima. Simplemente estoy avisando de lo que va a venir y está previsto en los planes quinquenales de esta gente que nos va a gobernar y someter. Menos mal para algunos como Elon Musk, aún les quedará el espacio y billones, trillones de galaxias por descubrir. Recordad, 9 de mayo... mañana, mañana, mañana...