TW
0

La política madrileña es tan complicada como codiciado es para los partidos políticos el control de su gestión.

Desde que Esperanza Aguirre consiguió por primera vez la Presidencia de la capital mediante la compra de dos miembros del partido socialista, el PP ha conseguido mantener el control de Madrid contra viento y marea.

Si Ayuso ha decidió adelantar las elecciones fue porque las encuestas le eran favorables y porque, dada la crisis de Ciudadanos en casi toda España, sus asesores le han dicho que podía aspirar a hacerse con una parte importante de los votantes ‘naranjas’ y que incluso podía aspirar a la mayoría absoluta y a no depender de Vox

Era una jugada maravillosa no sólo para Madrid sino también en para un PP estatal muy castigado por la alargada sombra de sus casos de corrupción

Sin embargo, estamos a la mitad de la campaña y hay tres elementos preocupantes para el PP:

1. Que, según los sondeos, la mayoría absoluta del PP está muy lejos de ser la opción más probable

2. Que el Vox actual es aún más radical que el de hace unos años y puede ser un problema para el PP no solo en Madrid, sino en el conjunto del Estado

3) En el debate del miércoles ocurrió algo insólito: PSOE, Más Madrid y Unidas Podemos visualizaron ante las cámaras un giro de 180 grados para no atacarse durante la campaña y para llegar a un acuerdo de gobierno si las urnas lo permitían. Una nueva estrategia fundamental.