Estas necesidades sanitarias pueden ser de diversa índole: las hay asistenciales, en las que se da respuesta a un problema determinado (diagnosticar e instaurar un tratamiento); las hay de prevención de la enfermedad y de promoción de la salud (desarrollar una estrategia para abandonar el hábito de fumar o para desarrollar unos hábitos de vida saludables); las hay de mantenimiento de la salud y cuidados, estas últimas de cada vez más importantes debido a las necesidades que generan las enfermedades crónicas, que aparecen al alargarse la esperanza de vida (establecer planes de cuidados para personas con determinadas enfermedades); las hay de realización de técnicas sanitarias ganando así la población una mayor accesibilidad, (realizar analíticas o espirometrías); las hay de apoyo emocional o incluso de consejo (cuántas veces acudimos la población a visitar a los profesionales de referencia para escuchar un consejo u opinión médica); las hay también de carácter administrativo, no por ello menos necesarias.
Y ¿quién mejor para realizar este cometido que los profesionales que conoces y en los que confías?
Para dar respuesta a todas estas necesidades en nuestro país, Atención Primaria de Salud cuenta con profesionales propios, médicos, enfermeras, auxiliares de enfermería, administrativos, farmacéuticos, odontólogos, higienistas, fisioterapeutas, matronas, psicólogos, trabajadores sociales... y seguro que en un futuro no muy lejano contará también con otras especialidades que pueden complementar la oferta asistencial como son los podólogos, dietistas o técnicos en educación física, entre otras. Cuenta también con el apoyo de otros profesionales del ámbito hospitalario que completan la oferta y ayudan a mejorar la accesibilidad.
Todas y cada una de las profesiones existentes han demostrado sobradamente su capacidad, su buen hacer, su esfuerzo, su razón de ser. No es casualidad que Atención Primaria de salud sea en nuestro país muy bien valorada por la población en las múltiples encuestas que año tras año se realizan, destacando a su vez los excelentes resultados en salud que conseguimos cuando nos comparamos con el resto de países de nuestro entorno.
En Atención Primaria se trabaja en equipo. Y dentro de este equipo cada uno de los agentes que intervienen tienen un papel fundamental para dar respuesta a estas necesidades. Equipos basados en la interrelación entre diversos profesionales, en la confianza y en el respeto mutuo por el profesional y por la profesión que representa.
En el caso de la actividad de las enfermeras su campo de actuación es muy extenso, su potencial de resolución de problemas es enorme, su capacidad para aportar conocimientos al equipo no tiene limites, su implicación profesional se demuestra día tras día. Afortunadamente hoy en día es inconcebible una atención primaria sin su participación.
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