Los chicos están bien

Avalada por cuatro nominaciones al Oscar, incluyendo mejor película, mejor guión original y mejor actriz (Annette Bening), «Los chicos están bien» es un agridulce retrato familiar en clave cómica, pero adaptado a los nuevos modelos de esta institución. Crónica ácida y madura sobre cómo las convenciones dificultan la evolución espontánea de los amplios espectros del amor, «Los chicos están bien» inicia su relato cuando la pareja formada por Bening y Julianne Moore ve rota su quietud al aparecer en escena el donante de esperma que les permitió tener sus dos hijos, papel interpretado por el también candidato al Oscar Mark Ruffalo.