POLÉMICA

Los controladores aseguran que el avión del emir de Catar «complica la operativa del aeropuerto de Palma»

La envergadura de la espectacular aeronave, de entre 65 y 80 metros, hace que sólo pueda despegar o aterrizar desde una de las pistas, que debe ser revisada posteriormente

El imponente Boeing 747-8 de Qatar Airways, a su llegada a Son Sant Joan | Foto: @controladores

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La visita de la familia real de Catar a Mallorca no pasa inadvertida. Desde que tomaron tierra en la noche del pasado domingo en el aeropuerto de Son Sant Joan hasta que se echaron al mar para disfrutar de las aguas del Mediterráneo a bordo del espectacular yate Al Lusail, de 123 metros de eslora y valorado en 500 millones de euros, propiedad del emir Tamim bin Hamad Al Thani. No son nuevos, pues en varias ocasiones y en años anteriores, ya se les ha visto por la Isla, especialmente a la actual esposa del jefe de Estado, Jawaher Bint Hamad que tiene especial predilección por Baleares, y por Mallorca en concreto.

Ese mismo día, el domingo, el emir del poderoso y pequeño país del Golfo Pérsico, Tamim bin Hamad Al Thani, mantuvo una reunión oficial con el rey Felipe VI, en el marco de la Cumbre de la ONU que se celebraba en Sevilla. Tras ello, se produjo el desembarco del jefe de Estado y su séquito, formado por su equipo personal y de seguridad, que se mueve a bordo de vehículos de alta gama y tintados. Puerto Portals y Calvià fueron la base de operaciones desde la que salir a navegar a bordo del Al Lusail por el litoral mallorquín.

Pero la espectacularidad y magnitud de todo lo que rodea a la saga de los Al Thani y sus actuales representantes lleva consigo una serie de problemas logísticos. El más notable lo han denunciado los controladores aéreos, utilizando su mediática cuenta en la red social X (@controladores). En la misma, se hacen eco de la llegada del imponente Boeing 747-8 de Qatar Airways que trasladaba a la familia real del país asiático hasta Son Sant Joan.

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Una aeronave clasificada con Clave F, al tener una envergadura de entre 65 y 80 metros. Unas características que complican la logística de un aeródromo como el de Palma, ya que ese tipo de aviones sólo puede operar, o lo que es lo mismo, aterrizar o despegar desde una de las pistas de la instalación mallorquina, la 06L/24R.

«Posteriormente a su aterrizaje o despegue, dada su envergadura, se realiza una revisión de pista por si hubiera introducido algún tipo de suciedad. Por el mismo motivo hay muchas restricciones con los rodajes simultáneos de otras aeronaves durante la operativa de un Clave F», refieren los controladores, que plasman esta incidencia con dos imágenes del espectacular B747-8 de Qatar Airways.

Mallorca es un destino predilecto para la familia real de Catar, que durante varios veranos ha sido vista disfrutando del mar, las compras e incluso de hoteles, residencias y villas de gran lujo en diferentes rincones de la Isla, donde no pasa inadvertido todo lo que mueve una de las sagas más poderosas del mundo, al frente de un pequeño Estado con un enorme potencial económico y energético.

Estaba prevista la llegada del emir de Catar anteriormente a este pasado domingo, pero la tensa situación a raíz de la crisis bélica entre Estados Unidos e Irán, y su afectación al país del Golfo, tras un ataque de Teherán a una base norteamericana ubicada en el emirato, alteraron los planes de Tamim bin Hamad Al Thani y su familia.