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La élite mundial del cubo de Rubik, en Calvià

La Sala Palmanova congrega a figuras internacionales en esta disciplina

Un joven participante durante la competición en la Sala Palmanova | Foto: Emilio Queirolo

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Cuando, en 1974, el profesor de arquitectura húngaro Ern Rubik, trataba de volver a colocar en su posición original un cubo que había creado con diferentes colores para su trabajo en el Departamento de Diseño de Interiores en la Academia de Artes y Trabajos Manuales Aplicados en Budapest, tardó en darse cuenta de que, en realidad, había diseñado un nuevo rompecabezas.

Lo que de buen seguro no podía imaginar en ese momento es que su invento, que al principio fue bautizado como ‘cubo mágico’, se convertiría en un fenómeno global en torno al cual, medio siglo después de su invención, se celebran cada año todo tipo de encuentros, certámenes y eventos alrededor del mundo. Un buen ejemplo de ello es la competición oficial celebrada en la Sala Palmanova el pasado fin de de semana, que congregó a unos 100 especialistas en el cubo de Rubik de renombre internacional.

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Organización
El evento se celebró bajo la organización de la Asociación de Speedcubing Mallorca, que contó para ello con la colaboración de la Asociación Española de Speedcubing y el aval de la World Cube Association (WCA), al tratarse de un torneo oficial.

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El encuentro contó con la participación de las figuras más destacadas de esta disciplina, consistente en resolver el cubo de Rubik en el menor tiempo posible, tanto en su forma tradicional (3x3) como en sus múltiples variantes, como las categorías de 2x2, 4x4, 5x5, 6x6 y 7x7, resolución con una sola mano o incluso con los ojos vendados, además de derivadas más complejas del famoso cubo, como ‘Pyraminx’, ‘Megaminx’ o ‘Skewb’.

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«Han estado aquí los mejores ‘speedcubers’ del mundo, capaces de resolver rompecabezas en pocos segundos», señalan desde la organización del evento, denominado oficialmente Mallorca Open 2025, que se desarrolló desde primera hora del sábado por la mañana hasta el domingo por la tarde, congregando a una multitud de aficionados y curiosos en torno al que probablemente sea el cubo más famoso del mundo.