Los asistentes podrán degustar toda clase de mariscos y platos gallegos. | Pere Bota

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Un pedazo de Galicia ha llegado a la Isla. El recinto de Son Fusteret acoge hasta el próximo 1 de octubre la décimosegunda edición de la feria MarisGalicia, donde, con el marisco como gran protagonista, el público puede degustar una muestra de la mejor gastronomía gallega.

«El marisco no es un producto barato, pero se puede comer a un precio relativamente popular. Es lo que ofrecemos: disponemos de contacto directo con los marineros y percebeiros, por lo que podemos ajustarlo. Cada mañana, el marisco llega desde Galicia en camiones-piscina», afirma el coordinador de la feria, Manuel Gómez, que augura un notable incremento en el número de asistentes después de la pandemia, y calcula que en este mes en Ciutat se consumirán 150 toneladas de marisco.

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En su carpa y terraza, de 1.500 metros    cuadrados, el público puede encontrar una gran variedad de platos, como el pulpo a    feira o con cachelos; percebes, mejillones y berberechos al vapor; cigalas y camarón cocidos; langostinos, navajas, cigalas, bogavantes, langostas, o zamburiñas a la plancha; salpicón de mariscos, almejas a la marinera o mejillones a la vinagreta,    además de un surtido de repostería gallega, compuesto por tartas    xacobeas, Monte do Gozo, de licor de café, empanadas, o crema gallega y crema de orujo. Todo ello acompañado por los mejores vinos gallegos.

Una de las novedades de esta edición es el sistema de pedidos para recoger: se podrá realizar la comanda en la web www.marisgalicia.es y recoger el pedido en el recinto de Son Fusteret, apenas unos minutos después. Además, se puede reservar mesa y, quien lo prefiera, puede realizar su comanda por vía telefónica.

MarisGalicia abre todos los días, con un horario de 13.00 a 16.30 h. y de 20.00 a 23.00 h., a excepción de los viernes y sábados, que cerrará sus puertas media hora más tarde. En estos dos días se cerrará la jornada con el gran espectáculo del Conxuro de la Queimada, un tradicional ritual gallego con el que se protegía de maleficios y espíritus extraños. La queimada se repartirá de forma gratuita entre los presentes.