La leche materna contiene un 85% de agua, y por ello, en verano más que nunca, las madres amamantan a su bebé a demanda para proporcionarle todo el líquido que necesita | Pixabay

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A mitad de agosto, llega el inicio de las ansiadas vacaciones y los largos días junto al mar. Sin embargo, para aquellas que se encuentran en periodo de lactancia, no es fácil detectar cuáles son todos los productos que pueden necesitar para disfrutar de un día de playa en compañía de su bebé. A continuación, presentamos los 10 imprescindibles que toda madre lactante debería llevar en su bolsa de la playa.

Sombrilla o tienda de playa

En compañía del bebé, ir a la playa se convertirá en sinónimo de llevar la sombrilla a cuestas. Cuanto más grande mejor ya que así, el bebé estará protegido de la exposición solar, y tú también. Otra muy buena opción es una tienda para proteger al pequeño del sol, al mismo tiempo que proporciona un descanso de la arena y el viento. Incluso evitando las horas con más sol, entre las 11 de la mañana y las 16 de la tarde, siempre es imprescindible proteger al pequeño con alguno de los accesorios mencionados. Extremar las precauciones frente a la exposición solar es fundamental durante el primer año de vida, y en general durante la infancia.

Pañales y toallitas

La demanda de tomas de leche del bebé en verano es mayor en comparación con el resto del año. Es por ello por lo que hay que ir bien equipada con pañales y toallitas para cambiar a tu bebé. Los pañales que más se recomiendan son los de poliéster ya que permiten que su piel respire a la vez que se adhieren a su cuerpo. Además, deben ser impermeables y con alta tecnología de absorción, para que no se inflen ni se deshagan dentro del agua.

Toalla grande

Se acabó llevar toallas pequeñas y finas a la playa para no ocupar espacio. Ahora necesitarás una toalla XL para que el bebé y tu podáis descansar sobre un espacio limpio, evitando que la arena pueda acabar entrando en sitios donde especialmente molestos como en los ojos o en la boca. Y, si quieres ir un paso más allá, encuentra una toalla anti-arena que facilite que las pequeñas partículas de arena y polvo desaparezcan, lo cual las convierten en imprescindibles tanto para que el bebé pueda gatear o jugar como para darle de comer.

Tumbona plegable

Una buena posición al pecho permite al bebé un menor esfuerzo además de una buena estimulación para alcanzar una producción de leche óptima. Por eso, una tumbona plegable es un accesorio más que útil para incluir en la lista de imprescindibles para un día de playa, tanto para poder dar el pecho o incluso para extraer leche con el sacaleches. Entre otros requisitos, es conveniente que sea lo más ligera posible para que transportarla no se convierta en un mal trago.

Crema solar SPF+50

Algunos protectores solares pueden contener ingredientes en su formulación que pueden ser agresivos para la piel de los más pequeños y causar reacciones o irritaciones. Por eso, es importante encontrar el producto adecuado para el bebé. Si es menor de seis meses, es recomendable no echar crema con protector solar y, por ende, es preferible evitar la exposición solar de forma prolongada. Si el bebé tiene más de seis meses debe utilizarse una protección muy alta SPF 50+ y resistente al agua, que tenga filtros físicos o minerales para una mejor protección. Se recomienda aplicar la crema cada dos horas y que sean hipoalergénicas, es decir, que no contengan PABA (ácido paraaminobenzoico), y esté diseñada para pieles sensibles debido a la delicadeza de su piel. Complementar el protector con ropa fresca y preferiblemente de algodón y colores claros además de crear un espacio con sombra. La madre lactante también debe protegerse del sol, preferiblemente con una protección también de SPF 50+, evitando su aplicación en el pecho para que la boca del bebé no entre en con el producto.

Hinchable y juguetes

A la hora de preparar la bolsa para la playa, incluir algún juguete para entretener al bebé garantizará una buena experiencia. Y, si tienes espacio en el coche, añade una piscina hinchable para rellenar con el agua del mar para que pueda jugar mientras se refresca en un ambiente controlado, siempre debajo de la sombrilla.

Botiquín

Con un bebé cerca, es común que su salud se desestabilice más fácilmente que la nuestra (una caída, ojos sensibles…) y no siempre tendremos un sitio cercano al que acudir. Por eso, una buena idea es llevar una pequeña bolsa, preferiblemente una bolsa de enfriado por si quieres incluir algunos medicamentos, con toallitas húmedas, alcohol, desinfectantes, un termómetro, antiséptico jabonoso, crema hidratante, tiritas, un peine y alguna gasa.

Bolsa térmica con enfriadores

En los días calurosos en la playa, los accesorios que permiten mantener el frío son esenciales. Además, podrás mantener las rutinas de cada comida o toma aun estando fuera de casa, algo muy importante para los bebes con los primeros meses de vida. Una bolsa térmica con enfriadores es una perfecta solución para poder transportar los biberones o la leche materna con la temperatura adecuada.

Sacaleches manos libres

Por último, pero no menos importante, un sacaleches puede ser el recurso más práctico para las madres lactantes en los días de playa. Es importante suministrar suficiente leche materna para cubrir sus necesidades, ya que en altas temperaturas el bebé suda más y corren un mayor riesgo de sufrir deshidratación. La leche materna contiene un 85% de agua, y por ello, en verano más que nunca, las madres amamantan a su bebé a demanda para proporcionarle todo el líquido que necesita. Al realizarse la extracción fuera de casa, el sacaleches debe ser manos libres, sin tubos ni cables. Además de los sacaleches, también pueden resultar útiles otras soluciones de lactancia como unas copas recolectoras de leche, para evitar fugas mientras jugando con el bebé.