El barman Israel Martínez, del bar Atípic de Artà, se encargó de servir un vermut tras otro a los asistentes. | Pere Bergas

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En las calurosas mañanas mediterráneas no hay mejor refrigerio que un vermut bien fresco. En el marco de la International Palma Boat Show, y bajo el lema ‘Hi ha coses que no s’han de perdre’, Licores Moyà, fábrica de licores y bebidas espirituosas en Artà con más de 130 años de historia, presentó este sábado su Vermut Rumbo en el Pantalán del Mediterráneo.

El barman Israel Martínez, del bar Atípic de Artà, se encargó de servir los vermuts a los asistentes, que pudieron probar una bebida muy especial. El vino base de Rumbo está elaborado a partir de la variedad Parellada, que produce vinos jóvenes neutros, con poco grado alcohólico.

Asimismo, en su elaboración se utilizan holandas envejecidas, de la variedad Ugny Blanc. Por otro lado, la combinación de botánicos es muy importante. Primero se aromatiza con ajenjo, canela y naranja, pero lo que hace de Rumbo una bebida tan especial, son sus maceraciones e infusiones finales de los botánicos del Palo de Mallorca Moyà, como la corteza de quina, las raíces de genciana, coriandro o cardamomo.