Muchas personas se vistieron de verde para la ocasión. | Pere Bergas

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En Irlanda, el Festival de San Patricio comienza el 17 de marzo y se prolonga durante cinco días; aquí sucede algo similar. Centenares de personas celebraron este domingo la fiesta de San Patricio en Santa Ponça, residencia de buena parte de la comunidad irlandesa de la Isla y uno de sus destinos turísticos predilectos. Aunque a la celebración asistiese menos público que en ediciones pasadas y la meteorología, con lluvias intermitentes, no invitase al paseo, el buen ambiente fue la tónica dominante a lo largo de toda la jornada, que contó con atracciones para todos los gustos.

A partir de las 10 horas, el público disfrutó de un gran mercadillo en el paseo Puig de Galatzó; en sus más de medio centenar de paradas, los paseantes encontraron todo tipo de objetos artesanales y una amplia oferta gastronómica: pudieron degustar originales y dulces recetas, como la tarta de chocolate y cerveza Guinness o los clásicos pasteles de zanahoria y de manzana; aperitivos típicos, como el irish sausage roll, un tipo de perrito caliente muy especiado, o platos elaborados, como el coodle, una suerte de cocido muy famoso en Dublín.

Durante todo el día, en un colorido y participativo pasacalles, el Circo Stromboli animó la zona del mercado con sus llamativos zancudos, envueltos en la bandera irlandesa y vestidos como tréboles, y sus monociclos y artistas del hula hop, que llamaban la atención de los más pequeños, quienes dispusieron de numerosos castillos hinchables en los que agotar parte de su infinita energía. Además, en el pasacalles participó la Colla de Geganters de Calvià, la banda de música McAgondell, y la batucada de Deixonats.

Al final del paseo, en la zona de los bares, donde se instaló un gran escenario, se concentró el ambiente festivo. Tras un fin de semana de desenfreno, en el que se llenaron todos los pubs de la Isla, muchos aplicaban el popular método, muy discutible a nivel científico, de combatir la resaca vertiendo más cerveza en el interior del cuerpo. Durante toda la jornada, que se extendió hasta las 18 horas, el público disfrutó de la música de grupos y solistas como The Raggle Taggle Gypsies, The Finnegans, Liam Live o John Bruce.