Paula, a costa de esfuerzo y años, se ha ganado un puesto en las cabinas de Dj.

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Paula Serra es una Dj un tanto especial. Lo decimos porque está esperando un hijo, trabaja como Dj, y encima representa a otros seis Dj’s. Es decir, se busca la vida ella y a la vez se la busca a otros seis… ¡Ah!, y no solo ‘pincha’ en la Isla, sino que con cierta frecuencia lo hace lejos de aquí: Marruecos, Argelia, México, Qatar, Berlín, Canarias, etc., esto último gracias a que a su vez tiene un mánager, en Eivissa, que es quien le encuentra trabajo en esos lugares, algunos de ellos muy bien remunerados.

«Son desplazamientos, como quien dice, de ida y vuelta, y todo muy bien organizado: llegas al destino, te acompañan al lugar de trabajo, pinchas, pernoctas, cobras y regresas a Palma… Hay lugares, como Qatar, en los que te recomiendan que no salgas del hotel, y pese a que haya cierto machismo en algunos países musulmanes, aceptan que una mujer los haga bailar a su son. En realidad, en esos lugares la Dj pasa desapercibida, no así, por ejemplo, en Berlín, donde la gente entiende de música, por lo que te conviertes en la reina de la noche, pues todo el mundo está muy pendiente de lo que pinchas».

¡Ah!, y además de todo eso, lo cual no es poco, hasta hace tres meses dirigió Ibiza Global Radio, una emisora especializada en música electrónica, «metiendo la publicidad cada hora».

Cobrar siempre con factura

Al igual que a otros colegas, «así como artistas, relaciones publicas, camareros, etc.», con la pandemia, Paula, no lo ha pasado bien, sobre todo porque, o no ha habido trabajo, o ha escaseado. «Y también porque –matiza– otros Dj se han ofrecido a trabajar por 30 euros, incluso por menos, lo cual nos ha perjudicado, sobre todo a los que cobramos en blanco, es decir, a los que cobramos con factura, y que sobre lo que cobramos, pagamos los impuestos. Como es mi caso y el de otros muchos colegas. Por tanto, percibimos unas cantidades superiores. Y si me ofrecen cobrar menos, les digo que no. Les respondo que ¿cómo voy a cobrar menos si encima debo descontar lo que se llevan los impuestos? Por eso les digo a los que cobran en negro, que encima cobran mucho menos, que no se quejen cuando vean a los subsaharianos vendiendo música en el top manta, de forma ilegal, y a bajo precio. Porque el Dj –insiste– tiene que estar en la legalidad, cobrando lo estipulado y deduciendo de ello lo que son impuestos. Yo lo hago así desde el primer día en que me metí en esto, todo gracias a que estuve con Trui, que lo hace todo muy legal, y que exige que todo lo tengamos en regla... Por ello, hay que decir también que si el Dj cobra en negro, que, repito, es mucho menos de lo que se paga en blanco, la culpa, en parte, la tiene el que le paga. Por eso, si todos cobráramos legalmente, muchas de las cosas que nos pasan, no pasarían. Muchos compañeros que van por la Ley no se quedarían sin trabajo por habérselo dado a otro… Que ha cobrado menos, y encima en B».

Eso por una parte.

Por otra, Paula también tiene muy claro que la mujer ha terminado por hacerse un hueco en el mundo Dj.

Partidaria del asociacionismo

«Somos uno más. Hay grandísimos Dj’s en el mundo que son mujeres… Por tanto, no hay que distinguir. Somos Dj’s, y punto. No hace mucho quisieron contratarme ‘porque necesitamos una mujer Dj’, me dijeron. ¿Y sabes lo que les respondí?, pues que «cuándo necesites un Dj me llamas, porque lo de la mujer Dj era antes. Porque ser Dj, hoy, ya no es cosa de hombres». Con lo cual le despejé todas las dudas que pudiera tener». Paula también es partidaria de que los Dj’s se asocien. Pues mejor afrontar los problemas en grupo, que solos, dice.

«Incluso que nos asociemos con los Dj’s de Eivissa, que son una asociación unida y fuerte, y que mira por el bien de todos, porque… ¿Recordáis cuando hace unas semanas el Govern dijo que los Dj no formábamos parte de la música en directo? Pues los de Eivissa hicieron que rectificara en un momento. ¡¿Cómo que no formamos parte de la música en directo…?! Pero si hay Dj’s, que llevan 50 años pinchando, haciendo bailar a millones de personas, y jamás han tocado un instrumento…! ¿Quién es, por tanto, el Govern para decir que no formamos parte de la música…? ¿ O en qué se basa para establecer no más de 60 decibelios como volumen de la música, cuando 60 decibelios es el sonido de la voz de las personas cuando hablamos… ? ¡Qué sabrán ellos! Por eso hemos de asociarnos, y así defendernos ante la ignorancia de algunos… Porque, a ver… ¿Alguien cree que la gente iría a Eivissa, por ejemplo, pagando 400 euros por día, si la isla no tuviera la movida musical que tiene de unos años a esta parte…? Pues no, ¡nadie iría! O no irían tantos como van ahora.... Y otra cosa: ¿Qué papel juega en esa movida musical el Dj? Desde luego, un papel muy importante. Por eso, asociándonos, seríamos más fuertes. Incluso le podríamos pedir al Govern que antes de opinar sobre decibelios hiciera una inspección para ver si todos los artistas estamos en regla».

Embarazada, sigue ‘pinchando’

Como hemos dicho, Paula está embarazada de seis meses, y mientras pueda seguirá pinchando. Porque lo tiene muy claro. «Porque si me encuentro bien –dice–, ¿por qué he de parar? Es más, así podré decirle a mi niña que ha estado escuchando música desde antes de nacer. ¡Ah!, y una vez que nazca, mientras no sea de noche, se vendrá conmigo a la gala de tarde en la que pinche. Sí. En la canastilla y a mi lado, ¿por qué no?».

Por último, os cuento que Paula es una gran amante y defensora de los perros, basta, si no, con echar un vistazo a su muro en Facebook. Y es defensora, sobre todo, de los perros sin pedigrí, perros de la calle, perros abandonados, «por lo cual estoy en contra de la compra-venta de perros; estoy en contra del ‘quiero uno de pelo largo, ojos azules, que no pese más de 30 kilos…’ Porque, ¿por qué comprar un perro si en las perreras los hay, incluso mejores de los que se venden?».

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Paula Serra, que está embarazada, piensa trabajar mientras pueda.