Esta es la primera ocasión en la que el mercado Mallorca Crea se celebra físicamente, ya que hasta ahora se organizaba ‘online’ a causa de la pandemia. Esta red de artesanos afincados en la Isla pretede poner en valor la labor del creador, así como concienciar a la población sobre la importancia del consumo sostenible, y acerca a los ciudadanos los detalles del proceso creativo de los artesanos. | Pere Bergas

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Arte, creatividad y tradición se aunaron este sábado en Géiser Market, un mercadillo organizado en la posesión de Son Amar, en el marco del Festival Géiser, por Mallorca Crea, una red de artesanos afincados en la Isla que «promociona el producto local, kilómetro 0 y respetuoso con el medio ambiente con el objetivo de concienciar a los residentes y visitantes sobre la compra directa al creativo».

Abierto al público general, los asistentes pudieron adquirir todo tipo de productos así como charlar con los artesanos, quienes, con gusto, les explicaron el proceso creativo. El mercado tendrá lugar en cada una de las fechas en las que se celebra el festival, es decir, durante los próximos cinco fines de semana.

Variedad

El mercadillo acogió más de una decena de paradas en las que los visitantes encontraron todo tipo de objetos hechos a mano: ilustraciones, moda para todas las edades, complementos, joyería o decoración.

«Este tipo de mercados van muy bien para darse a conocer y ponerse en contacto con otros creadores», explicó Rosa del Barco, una pintora especializada en el collage conceptual, con el que expresa «sensaciones e impresiones cotidianas».

Palma, Discreto, Mercadillo artesanal Géiser

En el puesto de Molta Muntanya, de Mar y Ferran, «dos excursionistas que suben montañas y las pintan», los asistentes encontraron camisetas y bolsas serigrafiadas con los mapas topográficos y dibujos de las principales montañas de la Isla.

La diseñadora industrial Alejandra Epifani, de Cartonpia, puso a disposición del público sus joyas de papel y cartón reciclado; la joyera y escultora Aïda Rull, sus piezas de plata y latón; Coloma Canyellas, de Madò Bet des Siurells, trajo sus modernos siurells, y Elena Lucio presentó sus innovadores envoltorios de cera de abeja, resina de pino y aceite de jojoba, una opción perfecta para olvidarse del papel de film y de aluminio.