Marineland

Uno de los entrenadores, dando de comer a uno de los pingüinos, algo que encanta ver a niños y mayores. | Amalia Estabén

Amalia EstabénPalma01/08/20 4:01
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Las grandes estrellas marinas del parque acuático Marineland se reencontraron con el público a mediados del pasado mes de julio, deseosos de hacer un hermoso abanico de evoluciones que hicieron las delicias de los niños y de los mayores. José Ángel Mendoza, responsable del departamento de Zoología, explicó que «el parque se mantiene con la misma actividad, aunque con mayores y rigurosas medidas de seguridad. Contamos con varios shows de delfines, focas, papagayos, leones marinos, y este año el de alimentación en directo a los pingüinos, que causa sensación entre los peques».

Antes de abrir sus puertas el parque a las 10.00 horas, los protagonistas tienen un suculento desayuno, a base de arenques, capellans y sporat, acompañados de cubitos de hielo. Todos acuden al más leve movimiento de los entrenadores, quienes, portando los cubos, se van acercando a su hábitat. Afirma Mendoza que «para todo ello cuenta con un equipo de entrenadores profesionales con mucha dedicación y amor a los animales».

A partir de las 10.30 horas se ponen en marcha los shows de papagayos, alimentación de pingüinos, para seguir con el espectáculo estrella más esperado: el de los leones marinos y delfines. Para ello, se cuenta con el grupo de entrenadores formado por Edu Ow, Fernando Martín, la guapa Blanca Sánchez, también nadadora sincronizada, y el coordinador, Félix Afonso. Este último señaló que «contamos con cinco delfines: Blue, Estel y Blava, nacidos en Marineland Catalunya; Aitami, de Canarias, y el belga, Mateo. Con ellos trabajamos todo el año a parque cerrado de 9.00 a 18.00 horas, considerando que el show es también entreno y cada entrenador tiene dos comportamientos nuevos con cada animal».

Prosigue el entrenador canario Félix Afonso aludiendo a que «los delfines son animales que necesitan mucha actividad psicológica y emocional. Todos los días tienen entrenamiento y chequeo médico. Con los leones marinos, todos nacidos aquí y uno catalán, aplicamos el mismo método. Son muy simpáticos, observadores y les gusta llamar la atención».