La adolescencia es quizá una de las etapas más difíciles para los padres. Época de muchos cambios, de negociar, de tiras y aflojas con los jóvenes en casa. Estos días, en redes sociales, está triunfando una carta escrita por un adolescente a sus padres y que, entre otras cosas, les pide que sobrevivan a «que os odie y no os rindáis».
En realidad, la misiva fue escrita en el año 2015 por la prestigiosa psicóloga Gretchen Schmelzer con el fin de ayudar a los padres con hijos adolescentes y que presentó bajo el título «La carta que tu adolescente no puede escribirte».
Este es el texto íntegro:
«Querido padre/madre:
Esta es la carta que quisiera poder escribirte.
En este momento estamos en una lucha. Lo necesito. Necesito esta pelea. No puedo explicarte las razones porque no tengo el idioma para ello y de todos modos no tendría sentido. Pero necesito esta pelea. Mal. Necesito odiarte ahora y necesito que sobrevivas. Necesito que sobrevivas a que te odie y que me odies a mí. Necesito esta pelea aunque también la odie. No importa de qué se trate esta vez: por la hora de volver a casa, por no haber hecho una tarea, por la lavandería, mi habitación desordenada, salir, quedarme, irme, no irme, novio, novia, no amigos, malos amigos. No importa. Necesito pelear contigo y necesito que pelees conmigo.
Necesito desesperadamente que sostengas el otro extremo de la cuerda. Aferrarme con fuerza mientras golpeo el otro extremo, mientras encuentro los asideros y los puntos de apoyo en este nuevo mundo. Solía saber quién era, quién eras, quiénes éramos. Pero en este momento no. En este momento estoy buscando mis límites y a veces solo puedo encontrarlos cuando estoy provocándote. Cuando llevo todo hasta el límite. Entonces siento que existo y por un minuto puedo respirar. Sé que anhelas el niño dulce que fui porque también anhelo a ese niño, y algo de ese anhelo es lo que me duele tanto en este momento.
Necesito esta pelea y necesito ver que no importa cuán malos o grandes sean mis sentimientos. No nos destruirán ni a ti ni a mí. Necesito que me quieras incluso en mi peor momento, incluso cuando parece que no te quiero. Necesito que te quieras a ti y a mí por los dos en este momento. Sé que apesta ser rechazado y etiquetado como el malo. Por dentro siento lo mismo, pero necesito que lo toleres y que otros adultos te ayuden. Porque yo no puedo hacerlo en este momento. Si quieres reunir a todos tus amigos adultos y tener un 'festival de ira-grupo-apoyo-para-sobrevivir-tu-adolescente', me parece bien. O hablar de mí a mis espaldas, no me importa. Solo no te rindas. No te rindas en esta pelea. Te necesito.
Esta es la pelea que me enseñará que mi sombra no es más grande que mi luz. Esta es la pelea que me enseñará que los malos sentimientos no significan el final de una relación. Esta es la pelea que me enseñará a escucharme a mí mismo, incluso cuando pueda decepcionar a otros.
Y esta lucha en particular terminará. Como cualquier tormenta, estallará. Y lo olvidaré y tú también. Y luego volverá. Y necesitaré que te aferres a la cuerda otra vez. Necesitaré esto una y otra vez durante unos años.
Sé que no hay nada satisfactorio en este trabajo para ti. Sé que probablemente nunca te lo agradeceré y ni siquiera reconoceré tu apoyo. De hecho, probablemente te criticaré por todo este arduo trabajo. Parecerá que nada de lo que hagas será suficiente. Y, sin embargo, confío completamente en tu habilidad para permanecer en esta pelea. No importa cuánto discuta. No importa cuánto me enfurruñe. No importa lo silencioso que sea.
Por favor, agárrate al otro extremo de la cuerda. Así sabré que estás haciendo el trabajo más importante que alguien podría estar haciendo por mí en este momento.
Con amor, tu adolescente».
19 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Madre mia
Chorradas. Los adolescentes hoy en día tienen de todo, demasiado. Les das cariño y a cambio recibes un puñado de tierra contra los ojos. Son prepotentes, desconsiderados y muchas veces tiranos contra sus padres, pongámosles el ejemplo de los adolescentes de otros países que trabajan de sol a sol a cambio de un plato de rancho y los ves agradecidos, felices y sonrientes y estos memos que se hacen llamar modernos siempre con cara de amargados y sin servir para nada más que odiotizarse mutuamente en las redes sociales. Más mano dura y menos privilegios, así es como se cura la tontería.
Conforme envejezco, más busco el respeto y menos el amor. Sin duda hay un tiempo para todo.
@Yomisma. Te repito lo mismo que a Sofía, Si no supiste educar e impartir disciplina cuando tocabas ahora no me vengas con peliculas. Tienes lo que eres.
@Sofía Sin duda alguna la culpa es totalmente tuya y del padre. Aprende a educar y impartir disciplina. Tienes lo que eres.
yo no fui capaz de pasar por eso, insultos, malos tratos, aun sin llegar a pegarme, objetos volando por los aires, policías dia si y dia no en casa, mi hijo tiene 17 años y mino mi moral de tal forma que ahora esta en un centro y quizás lo peor, no lo añoro, no quiero que vuelva, y no, no fue un niño maltratado si no amado
Se puede y se debe relativizar la sicología, sabiendo que existen, unas sesenta teorías sicológicas diferentes y oficialmente reconcodias.
Debía tener poco trabajo ese día la sicologa!
No hagas mucho caso a @ultima y de las cosas que dice como que despues de sembrar siempre se recoge la cosecha,!que ingenuidad!, !que banalidad! a veces a los padres nos pasa lo mismo que a los agriculrores que sembramos y al final hemos perdido el dinero, el tiempo,el trabajo y hasta la cosecha.
Es una carta Preciosa que acabo de compartir con mi hijo de 15 años. Acierta en un contenido delicado y puede ayudar bastante al ado en entender el porque de su cambio.