Recreación en ordenador del interior de una de las zonas del restaurante-espectáculo 'Hit'.

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El restaurante que abrirá Martín Berasategui en Mallorca esta primavera se llamará Hit y estará ubicado en el antiguo Es Fogueró, en la carretera de s’Aranjassa, a 10 kilómetros de Palma. Pero Hit será mucho más que eso, ya que albergará también una gran sala de dos pisos que ofrecerá espectáculos del más alto nivel y que se convertirá en una discoteca a partir de la medianoche.

Chus Iglesias, exgerente de Pachá, es la cabeza visible de este proyecto que cuenta con importantes socios del sector hotelero y empresarial de Mallorca. David Alayeto, arquitecto del Lío o del Hotel Pachá, ambos en Eivissa, ha sido el encargado de dar forma a los 30.000 metros cuadrados del complejo.

El restaurante de Berasategui, referente gastronómico universal y el chef de habla hispana con más estrellas Michelin, doce, tendrá dos espacios: uno exterior a la carta, en el que se podrá comer desde 35 euros y cenar por unos 60, y otro en el interior de la sala espectáculo, en el que el cliente tendrá la opción de elegir entre tres menús. «Es un gran honor para mí ofrecerles mis creaciones culinarias en Hit Mallorca. Mis platos varían de acuerdo a lo que nos ofrece la naturaleza, el mar y las estaciones, pero no tienen fronteras. Son una simbiosis entre los aromas y los sabores de mi región y aquellos que son típicos de la isla de Mallorca, que es un verdadero templo de la materia prima. Esperamos que sean el preludio de una deliciosa comida y una experiencia agradable», indicó el cocinero guipuzcoano.

El proyecto supondrá la creación de 200 puestos de trabajo y el personal del restaurante saldrá de las escuelas de cocina de Mallorca y se formará en el mítico restaurante de Berasategui en Lasarte.

Otro local del chef vasco junto a Santa Catalina

Al mismo tiempo que toma forma Hit Mallorca, el chef donostiarra está inmerso en otro local en Palma, éste situado en la Plaça del Pont, junto al barrio de Santa Catalina. Se tratará de un restaurante con una cocina tradicional, pero a la vez desenfadada y, por supuesto, de calidad.

El local cuenta con un planta inferior de 300 metros cuadrados destinada a almacén y cocina y una superior a nivel de calle de 240. Además, dispondrá de una terraza. Se espera que este proyecto vea la luz también la próxima primavera. Como dijo a un amigo. «Voy a Mallorca con las tanquetas».